El primer ministro iraquí, Haider al Abadi, anunció ayer la victoria frente al grupo Estado Islámico (EI), que en 2014 llegó a amenazar la existencia del país tras conquistar un tercio del territorio. La derrota militar del EI en Irak, que fue posible gracias al apoyo de la coalición internacional dirigida por Estados Unidos, marca un giro en la lucha, iniciada hace tres años, contra esta organización yihadista.
Blanco de múltiples ofensivas desde hace más de un año, el EI también perdió la mayor parte del territorio conquistado en la vecina Siria, y su "califato" autoproclamado en 2014.
"Nuestras fuerzas controlan completamente la frontera iraquí-siria y por lo tanto anuncio el final de la guerra contra Dáesh", acrónimo en árabe del EI, dijo Haider al Abadi en Bagdad.
En 2014 el EI se apoderó de un tercio del país en una ofensiva relámpago, controlando casi la totalidad de las regiones sunitas del oeste, el centro y el norte del país.
Tras tomar el control de un territorio equivalente en superficie a Italia, el EI proclamó un "califato" con dos capitales, Mosul en Irak y Raqa en Siria.
El ejército iraquí se había batido en retirada frente al avance de los yihadistas. Ante el peligro inminente, el ayatolah Ali Sistani, principal figura espiritual de la comunidad chiita, hizo un llamado a la movilización general. Este llamado desencadenó en la creación de las fuerzas paramilitares Hashd al Shaabi, que cuentan con decenas de miles de efectivos y que ayudaron a las fuerzas gubernamentales en sus ofensivas contra el EI.
De vuelta al combate, las fuerzas de seguridad iraquí, apoyadas por una coalición internacional liderada por Estados Unidos, lanzaron progresivamente la contraofensiva para reconquistar en 2016 Faluya y Ramadi en el oeste, pero sobre todo Mosul, en julio pasado. La última batalla se produjo recientemente en el desierto, cerca de la frontera siria.
En todo caso, expertos y militares estiman que el EI conserva una capacidad para hacer daño en Irak pese al anuncio del "fin de la guerra". Esto porque 3.000 yihadistas todavía siguen presentes en Irak y Siria, según la coalición internacional. Así, el "número 2" de las fuerzas Hashd al Shaabi asegura que "el EI ha sido derrotado a nivel militar en Irak pero no eliminado".
Según Abu Mahdi Al Mohandes, el EI "está todavía presente en ciertos lugares y sus miembros se intentan infiltrar entre los civiles y en los pueblos". "El EI cambió de método", añade. Además, afirma que "la seguridad está garantizada en las principales ciudades (...) pero (que) no podrá ser total sin un control completo de la frontera con Siria", de 600 km y situada en una región desértica.
Por el lado sirio, son el ejército y las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo (YPG) que se dividen el control de la frontera. Según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos, los yihadistas siguen controlando bolsones en Siria, en las provincias de Homs y Hama.