Irán negó que haya violado las normas de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (Opep) y subrayó que siempre ha cumplido con las cuotas fijadas por el citado cartel petrolero. En declaraciones divulgadas este sábado por la agencia de noticias local Mehr, el representante iraní ante el cartel petrolero, Mohamad Alí Jatibi, afirmó que las informaciones en sentido inverso que se han publicado recientemente la Agencia Internacional de Energía y otras fuentes "carecen de fundamento y no son fiables".

Irán siempre ha respetado las cuotas de producción de crudo que fija la Opep y nunca ha cometido violación alguna a este respecto... Es importante señalar que las cifras ofrecidas por esas fuentes son incompatibles", afirmó.

El grupo petrolero decidió a finales del año pasado disminuir a 4,2 millones de barriles su producción diaria debido a la crisis financiera que sacudió, sobre todo, a las principales economías mundiales.

Algunas fuentes han denunciado que Irán, que persigue precios más elevados, superó en septiembre su cuota en cerca de medio millón de barriles.

Irán, considerado el tercer país del mundo en reservas probadas de petróleo y gas, y el quinto exportador mundial, tiene sin embargo una precaria industria petrolera, en especial en el sector del refinado.

El Centro de Investigación Estratégica del Parlamento iraní ha advertido de que las exportaciones de petróleo de Irán podrían sufrir en el futuro un profundo y pronunciado descenso debido a las dificultades para la extracción y el aumento del consumo interno.

En su informe anual, el citado centro también alerta de que la industria petrolera iraní necesita una inversión aproximada de US$5.400 millones al año para poder mantener su actual nivel de exportación de crudo.

"Dado el crecimiento negativo de las inversiones, conseguir esta cantidad parece poco probable... El país necesita una inversión seria y crucial", avisa el documento, reseñado por la agencia de noticias local Fars.

El documento dibuja un negro panorama para el futuro del principal respaldo y fuente de ingresos de la economía iraní ya que considera que las exportaciones "podrían incluso descender a cero" si no se efectúa la referida inversión.

Según el régimen iraní, las sanciones internacionales son una de las razones de esta situación, ya que impiden la inversión extranjera.