Los Veintisiete han iniciado hoy las negociaciones con Islandia para su futura entrada en la Unión Europea, una adhesión sin fecha marcada que tiene en la pesca, la caza de ballenas y el sector financiero los mayores escollos.
Islandia promete aportar a la UE su experiencia en energías renovables y una posición geoestratégica única derivada del deshielo Ártico para, en contrapartida, obtener estabilidad financiera y monetaria así como un escudo de seguridad (el pequeño país de 300.000 habitantes no tiene ejército).
El ministro islandés de Exteriores, Ossur Skarphendisson, ha mantenido esta mañana el primer encuentro negociador con los representantes de todos los estados miembros, después de que ayer el Consejo de la UE aprobara el marco negociador y diera luz verde al comienzo del proceso.
Sin fecha para la adhesión, el comisario europeo para la Ampliación, el checo Stefan Fule, se ha limitado a vaticinar en rueda de prensa que se llevará a cabo en un "razonable periodo de tiempo".
Bruselas y Reikiavik tienen antes sí 35 áreas de negociación, entre las que destaca la pesca, pues Islandia quiere seguir manteniendo sus caladeros reservados con el argumento de que "ninguna economía depende tanto de la pesca", según ha explicado en la rueda de prensa Skarphedinsson.
Islandia solicitó formalmente su ingreso en la UE en julio de 2009, después de verse duramente golpeada por la crisis financiera global, que le forzó a pedir la ayuda del Fondo Monetario Internacional (FMI).