El Instituto de Salud Pública (ISP) decretó un plazo de seis meses para que los inhaladores que contengan clorofluorocarbono (CFC) adviertan que este compuesto daña la capa de ozono.
Así, según informó el organismo, los rótulos de envases deberán incluir la advertencia "Este producto deteriora la capa de ozono" o "Este producto no deteriora la capa de ozono".
La directora del ISP, Ingrid Heitmann, señaló que "la resolución instruye a los fabricantes advertir sobre la presencia de este compuesto, que daña la capa de ozono. Se trata de una advertencia e información a la población".
Añadió que "esta resolución da cumplimiento al Protocolo de Montreal, que fue ratificado por Chile, y que incluía una serie de iniciativas destinadas a proteger la capa de ozono".
Actualmente, de acuerdo al organismo, en el mercado existen 123 inhaladores con CFC y 125 productos libres de CFC.