¿Quién no ha tomado paracetamol para un dolor de cabeza, bajar la fiebre y aliviar un dolor muscular? Es uno de los analgésicos más utilizados por los chilenos y, si bien es considerado un medicamento seguro, su ingesta en dosis superiores a las recomendadas puede provocar una falla hepática e, incluso, la muerte. Según los registros oficiales, cada año se registran cerca de 300 intoxicaciones por esta causa y la mitad de los afectados son niños.
Es por ello que el Instituto de Salud Pública (ISP) publicará una resolución que prohíbe el uso de saborizantes en el producto y exigirá comprimidos, gotas y jarabes tengan envases seguros. Según su directora, Ingrid Heitmann, también se evalúa prohibir su publicidad.
La decisión se tomó luego que la Agencia de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA), emitiera a fines de julio un alerta sobre el uso de este medicamento, por el daño hepático que se ha comprobado en niños.
El doctor Enrique Paris, director del Centro de Información Toxicológica (Cituc) de la UC, dice que la dosis máxima recomendada es de cuatro gramos diarios, equivalentes a ocho comprimidos de 500 mg, en caso de adultos. En niños, son 60 mg. al día por kilo de peso. La ingestión de una dosis superior puede producir intoxicación.
Paris advierte que el riesgo es que "la gente, además de tomar paracetamol puro, a veces ingiere otros fármacos como descongestionantes o jarabes para la tos, que contienen el compuesto y se produce una sobrecarga para el organismo, que puede terminar en daño hepático". Por eso, sostiene que junto con la prohibición del uso de saborizantes y la obligación de contar con envases seguros, es necesario que se simplifiquen las presentaciones del producto.
Actualmente hay versiones de 80 mg hasta 500 mg. Además, en aquellos medicamentos compuestos, debería indicarse claramente en el envase que contiene paracetamol y en qué dosis.
Otro problema detectado es la ingesta intencional de paracetamol en jóvenes. El ISP trabaja junto con las clínicas para analizar las muestras de intoxicados por remedios y la gran mayoría corresponde a sobredosis utilizadas por adolescentes para suicidios.