El ministro de Defensa de Israel dijo el martes que aún existen grandes diferencias en las conversaciones de paz con los palestinos tras la más reciente visita del secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, y manifestó dudas sobre las posibilidades de alcanzar un acuerdo final en abril.
Las negociaciones sobre un Estado palestino se reanudaron en julio tras una pausa de tres años y se fijó una meta de nueve meses para un acuerdo permanente, en medio de un profundo escepticismo de que se pueda lograr un pacto para poner fin al conflicto de décadas.
"Estamos intentando lograr un marco de trabajo para la continuación de las negociaciones por un período que supere los nueve meses en los que algunos pensaron que podríamos alcanzar un acuerdo permanente", dijo a la prensa el ministro de Defensa israelí, Moshe Yaalon.
"Está claro que hay grandes diferencias -no son nuevas- pero definitivamente es de nuestro interés seguir con las conversaciones", afirmó, sin definir esas diferencias.
Estados Unidos está tratando de mediar un "marco de trabajo" de orientaciones generales en que se aborden temas centrales, como fronteras, seguridad, el futuro de los refugiados palestinos y el estatus de Jerusalén, y que los detalles se completen posteriormente.
Antes de poner fin a su décima visita a la región el lunes, Kerry dijo que ambas partes estaban logrando avances, pero que aún existe la posibilidad de que no lleguen a un acuerdo.
El embajador de Estados Unidos ante Israel, Dan Shapiro, dijo el martes que Kerry volvería pronto para continuar con sus conversaciones con los líderes palestinos e israelíes.
"Tomaremos en consideración las sugerencias, solicitudes y deseos de las partes y espero que trabajemos de modo que en pocas semanas, o quizás un mes -no sé cuánto tiempo-, estemos listos para presentar una propuesta para un marco de trabajo sobre todos los temas centrales", declaró Shapiro en hebreo.
Un alto funcionario palestino dijo que ellos buscan un acuerdo escrito sobre un marco de trabajo.
"Queremos abordar temas concretos, como decir que la capital palestina estará en 'Jerusalén oriental', no sólo 'en Jerusalén'", comentó el funcionario.
Los palestinos buscan establecer un Estado en la Cisjordania ocupada y en la Franja de Gaza -enclave controlado en la actualidad por el grupo islámico Hamas, que se opone a los esfuerzos de paz de Estados Unidos-, con Jerusalén oriental como su capital.
Israel capturó esas tierras en la Guerra de Oriente Medio de 1967 y retiró a tropas y colonos de Gaza en el 2005.
En sus comentarios, Yaalon señaló que Israel busca un acuerdo de "marco de trabajo" menos rígido al que quieren los palestinos, en un aparente reconocimiento a preocupaciones de que cualquier acuerdo formal ahora podría aumentar la oposición de miembros de línea dura dentro del Gobierno israelí.
"No estamos lidiando con un acuerdo de marco de trabajo, sino con un marco de trabajo para la continuación de negociaciones por un período más largo", sostuvo Yaalon.
Shapiro dijo que Kerry se había sentado por "muchas, muchas horas" con líderes palestinos e israelíes y que había escuchado de ellos cosas que "quizás nadie más ha oído".
"Pese a que ya han tomado decisiones valientes, él (Kerry) estima que ambos tienen la capacidad de tomar decisiones más duras con el respaldo de sus pueblos respectivos", manifestó Shapiro.