Italia limitará a un 30 % la presencia de niños extranjeros en las aulas escolares a partir del curso 2010-2011, según informó hoy el Ministerio de Educación de ese país a través de un comunicado.
En la nota se señala que "el número de alumnos extranjeros presentes en cada una de las clases no podrá superar el 30% del total de los inscritos, como resultado de una equilibrada distribución de los alumnos con nacionalidad no italiana entre los institutos de un mismo territorio".
Sin embargo, se precisa que dicho límite podrá ser aumentado o reducido por decisión del director general de la oficina escolar regional, en base al conocimiento que tengan los alumnos extranjeros de la lengua italiana.
La medida se aplicará de forma progresiva a partir del año escolar 2010-2011.
El pasado mes de marzo la ministra de Educación italiana, Maria Stella Gelmini, adelantó que se estudiaba esta medida, con la que, según dijo, se pretende evitar la creación de "clases gueto" en las que haya mayoría de niños extranjeros.
En esa misma línea, Gelmini precisó hoy que "fijar un techo del 30 por ciento de alumnos extranjeros por clase es un modo útil para favorecer la integración".
"Es necesario poner a los niños extranjeros en clases con pequeños italianos para evitar, como sucede en muchas ciudades, que se formen escuelas y clases sólo de extranjeros. Los alumnos de otros países necesitan estar en clase con italianos para poder integrarse del mejor modo posible", precisó la ministra.
Asimismo, Gelmini subrayó que junto a ese límite para la presencia de niños extranjeros en las aulas, también es "fundamental establecer clases de inserción de una duración limitada para poder enseñar el idioma a los que recién llegados".