El Presidente de Francia, Nicolas Sarkozy y el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, propusieron hoy modificar el llamadio Tratado de Schengen, que establece la libre circulación de personas, como consecuencia de la actual crisis migratoria por el flujo de indocumentados provenientes del norte de Africa, debido a las revueltas en varios países.
Ambos mandatarios, reunidos en una cita cumbre en Roma, propusieron una carta común que Italia y Francia enviarán al presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, para pedir una "mayor solidaridad" a sus socios y la colaboración en medidas de apoyo a los países de la ribera sur del Mediterráneo.
Las tensiones diplomáticas entre París y Roma en torno a la crisis migratoria alcanzaron su nivel más alto el domingo de la semana pasada, cuando Francia bloqueó durante casi todo el día el acceso de trenes procedentes de la ciudad fronteriza italiana de Ventimiglia. París alegó motivos de seguridad, por la celebración de una manifestación no autorizada, y recibió después el respaldo de la Comisión Europea, consignó hoy el diario español El País.
"Queremos que ese tratado viva, pero para que viva se tiene que reformar", exigió Sarkozy.