La italiana Enel, que controla el mayor grupo eléctrico que opera en América Latina, venderá activos el próximo año para reducir su abultada deuda y mantener su calificación crediticia en A.
El plan de negocios de Enel prevé vender antes de que finalice el 2010 activos para obtener 7.000 millones de euros (unos 10.000 millones de dólares) y bajar su deuda en hasta 45.000 millones de euros.
Se espera que la compañía cierre este año con una deuda de 53.000 millones de euros.
Enel, la eléctrica europea más endeudada tras la compra de su rival española Endesa, se comprometió en su plan de negocios 2009-2013 a vender activos por valor de 10.000 millones de euros. Las desinversiones hasta la fecha llegan a 3.000 millones de euros.
"Para 2010 tenemos un objetivo de deuda neta de 45.000 millones de euros con un EBITDA de 16.000 millones de euros", dijo el presidente financiero de Enel, Luigi Ferraris, en una entrevista con Reuters Insider, el servicio de televisión de Reuters.
La empresa confirmó las cifras del plan de negocio de la compañía.
Enel pretende colocar en manos privadas hasta el 49% de Enel Green Power (EGP), la compañía de energías renovables más grande de Italia, que inicialmente quería vender antes del final de 2009.
"Ya hemos recibido muestras de interés no solicitadas de posible compradores. Hay apetito por estos activos", dijo Ferraris, que es también el responsable de planificación y control de la filial.
Enel, a través de sus unidades Endesa y Enel Green Power, es el mayor grupo eléctrico que opera en América Latina.
A comienzos de mes, su presidente ejecutivo, Fulvio Conti, dijo que Enel SpA seguirá invirtiendo en América Latina al mismo ritmo que llevaba, es decir, unos 5.000 millones de euros en cinco años.