En las abarrotadas instalaciones del gimnasio corporativo Chilectra tuvo lugar en la jornada de ayer la inauguración de la decimoquinta versión del que muchos consideran ya el principal campeonato deportivo juvenil para niños en Chile. Al menos ésta fue la idea central que esgrimieron en los instantes previos a la largada oficial del campeonato, organizadores y auspiciadores del evento, visiblemente satisfechos por la creciente acogida que el torneo ha tenido en el seno de la sociedad chilena a lo largo de los últimos 15 años.
Y es que la Copa Chilectra, en la que han tomado parte durante todo este tiempo "más de 100.000 niños procedentes de 33 comunas de la Región Metropolitana", se ha convertido ya en un auténtico clásico futbolístico y en una formidable herramienta social para la integración de jóvenes a través del deporte. "Cuando comenzamos con esta idea hace 15 años, no esperábamos que nos íbamos a transformar en la Copa más importante de Chile. Hemos hecho una bonita labor, pero todavía hay mucho por hacer. Creo que el objetivo se está cumpliendo, pero no sólo desde un punto de vista deportivo, sino también a nivel humano. Hemos conseguido que los chicos adquirieran unos valores, y eso también es fundamental", rescató en conversación con La Tercera Iván Zamorano.
El ex delantero, que participó junto a los también medallistas en Sídney 2000 Nelson Tapia, Rafael Olarra, Pablo Contreras y Manuel Neira en un partido de exhibición ante una selección de campeones históricos de la Copa Chilectra -integrada por los hoy futbolistas profesionales Carlos Lobos, Jaime Carreño, Zederick Vega, Nicolás Guerra y Leandro Cañete-, abordó también algunos temas de rabiosa actualidad dentro del panorama del balompié chileno.
Zamorano, por ejemplo, se refirió al jugador de Universidad Católica Jeisson Vargas -el gran ausente en la presentación de la Copa pese a que estaba anunciado a "un gran proyecto del fútbol chileno", sin entrar a valorar si su declaración de rebeldía y su determinación de abandonar la UC este mismo semestre está siendo o no la acertada. "Yo no puedo ser objetivo porque yo me fui a Suiza con 20 años", se excusó.
El goleador sí que ofreció su visión personal sobre la marcha de Jean Beusejour de Colo Colo a Universidad de Chile, su clásico archirrival: "Yo una vez lo escuché a él y dijo que este cambió no tiene que ver con camisetas sino con convicción, y eso me parece fantástico". "Pero yo no lo haría, yo jamás habría jugado en Universidad de Chile", sentenció Bam Bam.
El acto de presentación de la Copa, en el que también participaron el gerente general de Chilectra, Andreas Gebhardt, responsables del Grupo Zamorano y la ministra del deporte, Natalia Riffo, quien se encargó de dar el simbólico puntapié inicial a esta nueva edición, concluyó con el mencionado partido de exhibición -en el que los campeones históricos de Chilectra derrotaron por 10-7 a los medallistas de Sídney-, y que sirvió de aperitivo para el primer partido oficial del torneo, disputado entre los equipos de Santiago y Ñuñoa (5-1). Hasta 2015 y durante 6 años, los campeones de la Copa Chilectra viajaron a España a jugar contra la sub 13 del Real Madrid. En 2016, la comuna campeona viajará a Italia a jugar contra al Inter de Milán, camiseta que también vistió Zamorano.
Entre los participantes históricos de Chilectra está el ausente Jeisson Vargas, quien participó en la Copa Chilectra 2010 en representación de su comuna, Recoleta, y quien ahora se encuentra ultimando los detalles de su marcha al Bologna. Y Carlos Lobos y Jaime Carreño, también de Recoleta, que sí compitieron ayer pero se negaron a realizar declaraciones y a revivir sus vivencias en este importante torneo de formación por petición expresa de su club.
Quilicura, el campeón de 2015, busca sucesor.