Por estos días, cientos de profesores mantienen una movilización que ya lleva semanas, que se ha radicalizado y que pide la renuncia del Colegio de Profesores, Jaime Gajardo, por firmar un acuerdo con el gobierno sobre la agenda corta del Magisterio que, para ellos, no ha sido debidamente discutido entre los docentes. 

En entrevista con La Tercera, el dirigente dice que "aquí hubo acciones de grupos de profesores que adelantaron la consulta de manera irregular y enlodaron todo el proceso. No desconozco el acuerdo, pero eso es actuar por encima de la institucionalidad". Además, Gajardo culpa de las movilizaciones a algunos de sus colegas que, según él, "no creen en nada" y están digitados por sectores que sólo buscan perjudicar al gobierno.

Tras siete años de presidente de los profesores, y cuando todavía restan dos antes de que culmine su tercer período, Gajardo ha tenido que tomar sus resguardos. Sigue viviendo en San Joaquín, pero entiende que el ambiente, para dirigentes como él, se ha puesto más que espeso. "Uno toma resguardos para no exponerse, como no ir, por ejemplo, al barrio Brasil a copetearse. Son cosas que uno tiene que asumir, tiene que ser responsable", comenta. "Lo otro es que tengo un chofer, que lo tengo hace mucho tiempo, que me acompaña y trata de ser un resguardo, o por lo menos avisa si pasa algo".

Asegura que quienes están detrás de la disidencia "no diría que hay líderes, sé que se han tratado de juntar, pero se juntan y se disuelven altiro. Es una cuestión muy dispersa, que es parte de lo que vivimos como país". Además, sobre quienes lo critican dice que "no es agradable que el argumento sea insultarme, que me echen garabatos, que algunos mientan. Algunos seguirán porque tienen dos objetivos: no aceptarle nada al gobierno y echar al presidente del colegio".