El senador y vicepresidente del PPD, Jaime Quintana, fue uno de los impulsores de la hoy fallida carrera de Ricardo Lagos a La Moneda. Tras la decisión del ex presidente de retirar su candidatura, el ex timonel de la colectividad y autor de la tesis de la "retroexcavadora" instala la opción de que el partido levante una carta propia para viabilizar la primaria oficialista, debido a que la DC no quiere enfrentar solamente a Alejandro Guillier en esos comicios previos.
Considerando que era previsible que el PS no apoyara a Lagos, ¿hubiera esperado más generosidad del ex presidente, en vez de dejar al PPD sin candidato a semanas de inscribir la primaria?
Lagos entró a la cancha para salvar un proyecto de centroizquierda amenazado por una derecha conservadora, con un Piñera que se viene con las banderas de la contrarreforma. Se jugó por una campaña de ideas, pero, como él lo dijo, no pudo unir a los suyos. El PPD no podía tomar otro camino, fue leal no solo con Lagos sino que con el programa, las ideas. Y es por eso que el PPD hoy no puede darles cheques en blanco a otros liderazgos. No actuamos con la ética del calculista, sino de la convicción y la lealtad. Estamos tranquilos porque no dejamos a nuestro líder peleando solo en una cancha política adversa.
¿Por qué no podía un ex presidente, apoyado por un partido, competir en primarias?
Lagos lo dijo en su acto de despedida: "Si no logré convencer a los míos...". Y cuando dice "los míos", se refiere a los partidos más cercanos, porque desde el año 89 a la fecha nunca el progresismo ha enfrentado separado una elección como podría ser en esta ocasión a raíz de la decisión del Partido Socialista, que es difícil de entender. Son ellos los responsables si es que no hay primarias, aunque no los únicos. Hay que ver qué pasa con la DC, con otros partidos, pero ellos van a tener una cuota grande de responsabilidad si es que no hay primarias. A Lagos no le podíamos pedir más.
Usted dice de que el PPD no actúo de modo calculista. ¿Cree que el PS, al optar por un candidato que marca más en las encuestas (Guillier), fue oportunista?
Parece que son más fuertes los vientos de la banalización de la política y del cálculo oportunista que la política de contenidos y visionaria.
Usted dice que el PPD no puede dar un cheque en blanco. ¿Qué camino debe tomar el partido?
El PPD tiene que seguir siendo coherente y consecuente, como ha sido en este último tiempo, y eso significa que lo más importante es el programa. Para nosotros, nuestro candidato es el programa, y nuestro candidato es la defensa de la primaria.
¿Cuándo y cómo se resuelve eso?
El PPD tiene que tomarse el tiempo que tenga que tomarse. Yo no creo que haya que salir corriendo a tomar definiciones. Hay que ver especialmente el compromiso de los distintos candidatos con las ideas.
En el oficialismo se ha planteado que el PPD podría levantar un candidato propio, como Guido Girardi...
El PPD se tiene que tomar su tiempo, no se puede descartar nada. Y no descartar nada podría significar que eventualmente se le pidiera a alguno de los militantes nuestros, que tiene un apoyo ciudadano o que ha manifestado interés en algún momento, como Lagos Weber, Girardi, Tarud y, por qué no, recurrir al militante mejor evaluado en las encuestas, que es (el canciller) Heraldo Muñoz. El PPD tiene que ser responsable con la unidad de la coalición, y eso significa incluso ir a tocar la puerta al militante que goza de la mayor adhesión pública, por el cual nunca se ha preguntado para elección de presidente, que es Heraldo Muñoz, por ejemplo.
Con un candidato PPD, ¿la DC tendría que desechar el argumento que se ha dado tras la dimisión de Lagos, de que sería una primaria desigual para Goic frente a Guillier?
Si a alguien le pudieran parecer pocos los gestos amistosos y de unidad que el PPD ha hecho, como pocos partidos, para ayudar a la unidad, yo digo que incluso podríamos explorar un nombre, un candidato nuestro, y de esa manera asegurar la primaria. El PPD tiene que actuar asumiendo el rol articulador de la centroizquierda que el PS ha desechado.
Hace algunas semanas, Lagos advirtió al Frente Amplio (FA) que el verdadero "adversario" es la derecha. En ese momento, usted dijo que la Nueva Mayoría puede necesitar al FA en segunda vuelta o viceversa. ¿Cómo analiza la irrupción de Beatriz Sánchez bajo ese escenario?
El surgimiento del Frente Amplio es un llamado de atención para ser consecuentes y coherentes con nuestro programa de cambios, para escuchar bien las demandas de una clase media y de muchos sectores cansados de los abusos, de los privilegios, de pensiones indignas, de isapres pillas, con una educación de mala calidad. Respecto de lo que podría pasar en una segunda vuelta, en segunda vuelta todas las fuerzas progresistas tienen que unirse. Si Beatriz Sánchez llegara a pasar a segunda vuelta, no dudaría ni un segundo en darle mi voto. Esa misma reflexión deben hacer las fuerzas del Frente Amplio en igualdad de condiciones, porque yo no miro en menos a nadie y creo que ellos están levantando un proyecto alternativo serio.
¿Han ganado mucha fuerza en la izquierda?
Se han ganado su espacio en la lucha en nuevos movimientos sociales que debemos reconocer, que probablemente algunos de ellos fueron los que perdimos en la antigua Concertación, pero también quiero reivindicar que desde la Nueva Mayoría, cuando hicimos la reforma al sistema binominal, lo hicimos para generar condiciones para el desarrollo de nuevas fuerzas, anteriormente bloqueadas. Por lo tanto, no vemos con preocupación la irrupción del Frente Amplio.
¿No se sienten un poco mirados en menos por el FA?
Uno a veces advierte que el Frente Amplio es más crítico con la Nueva Mayoría que con la derecha. Nuestro adversario no es el FA, al revés. Sentimos que tarde o temprano las fuerzas que dicen representar al mundo progresista, las ideas de izquierda, tienen que encontrarse, no solo pensando en la segunda vuelta.