Es una Copa Libertadores generosa, que reparte invitaciones a soñar con ella sin privilegiar a los equipos de élite o de rica historia. Hay lugar también para que se ilusionen los más humildes. Unión Española no rechaza esa chance. Al contrario, la toma y se entusiasma. Después de ganar su grupo, supo imponer condiciones en el 0-0 de la ida de octavos, en el Sur del Gran Buenos Aires y frente al renovado Arsenal de Martín Palermo. Por eso, antes de levantar vuelo de regreso a Santiago, demostró Sebastián Jaime que las expectativas son grandes. "Tenemos equipo para más. Estamos convencidos de que podemos seguir avanzando".

En esa charla con La Tercera, a la hora de analizar el escenario de la Libertadores, Jaime detalló: "A Vélez, que es un equipazo, en Paraguay le ganaron en el último minuto. Los brasileños suenan fuerte y se hacen respetar, pero no parecen invencibles. Por ahí Cruzeiro se ve como un poquito superior al resto. Pero no hay un equipo en esta Copa que a uno le haga decir que es el gran candidato".

Decía que Unión Española está para más. ¿Para qué está?

Hay que ir despacio. Fue muy bueno para nosotros ganar el grupo. Ahora, con Arsenal, de visitante, no ganamos porque el arquero de ellos fue figura y sacó dos pelotas bárbaras. Por eso el empate, aunque es bueno, nos dejó un sabor amargo. Además, el árbitro en varias jugadas para amonestar a jugadores de Arsenal no sacó amarillas, algo que los hubiera condicionado. Pero bueno, ya está. Lo importante es que jugando afuera de casa hemos hecho una muy buena campaña. Por lo pronto, estamos para pasar de fase. Después, iremos viendo.

¿Cuál será el secreto para ganarle a Arsenal en el Santa Laura?

El partido será muy parecido. Tenemos que hacer lo mismo, concentrarnos en nuestro juego: manejar la pelota, tratar de convertir y no cometer faltas cerca de nuestro área, porque ellos son muy fuertes en las jugadas detenidas, en las cuales nosotros tenemos algún déficit.

¿Es una presión para ustedes ser el único equipo chileno en carrera en la Libertadores? 

Al contrario. Es lindo. Además, la Libertadores no es algo nuevo para Unión. Es la tercera Copa consecutiva que venimos jugando, siempre siguiendo una línea, con el mismo técnico. No somos menos que nadie. El tema es mantener la concentración, no cometer errores. Si convertimos, podemos llegar lejos. Lo mejor es que todo depende de nosotros.