Jaime Vera: "Ser campeón me haría bien como técnico"

Con el triunfo del miércoles ante Gremio siguen vivos en sus dos frentes. En el torneo local están peleando el título, pero también otro decena de equipos. ¿Estamos hablando de un torneo muy mediocre o muy competitivo?

Yo creo que competitivo, porque si hay varios equipos con posibilidades de ganar es porque la competencia ha sido disputada. Y eso es más atractivo que negativo.

Pero una decena es demasiado.

Pero es porque son torneos cortos, porque yo te aseguro que si el torneo fuera largo, prevalecerían los equipos que tienen más jugadores, mejor plantel en número. En 15 fechas, si tú agarras una racha de cinco ganados, puedes salir campeón. Nos ha pasado a nosotros.

¿Esperaba estar a estas alturas del semestre en la situación en la que están?

La verdad es que no. En la Libertadores no esperábamos tener nueve puntos, porque nos tocaba enfrentar a un equipo realmente fuerte como es Gremio.

¿Se están empezando a creer el cuento los jugadores?

Sí, porque un triunfo como el del miércoles te deja un sabor dulce. El cuento ahora con mayor razón se lo tienen que creer.

Sin embargo, en el partido contra Zamora, que el equipo remontó de forma épica, usted dijo que en la banca ya estaban entregados. No parece ese el discurso de un gran motivador.

Sí, pero es que yo soy sincero y la verdad es que yo sentí eso, porque hasta el minuto 90 íbamos perdiendo y el partido se nos acababa. Pero el fútbol tiene estas cosas, a veces los técnicos levantan a los jugadores y a veces, como el equipo hizo ese día, los jugadores levantan a la gente y a su técnico.

En más de una ocasión hizo alusión al tema de la suerte, diciendo que para la mayoría todo lo que le estaba pasando a Iquique era sólo raja. Pero la suerte también cuenta, ¿no?

Por supuesto. Pero es un dicho, un chilenismo que uno ocupa para darle un poco de sabor a las charlas, para que no me vean como un tipo amargado y serio. Mi asesora de comunicaciones me dijo: 'Tienes que tirar una frase diferente a lo que tú hablas, porque te ven un tipo serio, siempre de bajo perfil y hay que romper esa línea. Rómpela y te vas a dar cuenta de que todos los medios se van a fijar en esa frase, pero también van a estar más pendientes de lo que tú estás haciendo y de tu equipo'. Y lo hice. Y la raja es también algo que está dentro del fútbol. Y que necesitas.

¿Y es realmente un tipo serio o su asesora le recomendó parecerlo?

Es que yo siempre he pensado que el fútbol es seriedad, con la alegría que corresponde porque es un juego. Pero yo soy un chico muy alegre. Los que me conocen te pueden decir lo mismo, que soy un tipo chistoso. Si hay que cantar, canto, si hay que bailar, bailo, si hay que disfrazarse, me disfrazo. Soy un tipo normal, natural, con mucha felicidad en el cuerpo. Pero de repente como que el fútbol te hace perder esas cosas por estar pendiente de ganar y de ganar.

¿Preferiría hoy ganar un título con raja o perderlo, como pasó el último semestre, habiendo hecho méritos para salir campeón?

Estando en Iquique, si es raja o si es suerte o si es trabajo, me daría lo mismo. Ganar significaría pasar a la historia en la ciudad. Ser campeón a mí me haría muy bien como técnico, porque al final lo que vale es el campeonato.

Dice que el título le vendría bien. ¿Está pensando en cambiar de aires?

Siempre está la opción de que a uno lo estén mirando desde afuera, le hagan un seguimiento. Se ha hablado de que tengo opciones en México, en el Morelia, y la noticia no salió de Chile ni de mí, sino de México. Pero estoy contento en Iquique, tengo contrato hasta finales de 2018. Como he dado una vuelta muy larga, no soy un aparecido como entrenador. Llevo más de 10 años trabajando en todos los estamentos y hoy día está dando frutos todo ese largo camino.

¿Hay muchos aparecidos en el fútbol?

Siempre los hay, pero algunos te sorprenden. El fútbol es muy dinámico y yo tengo claro que a la vuelta de la esquina siempre está la derrota. Y para eso me tengo que preparar. Porque ganar siempre es muy difícil y cuando uno no está preparado para la derrota es cuando los golpes le duelen más.

Dos de sus rivales por el título son la U y Colo Colo. ¿Es más de Hoyos o de Guede?

De ninguno de los dos. Ambos son grandes entrenadores, pero yo no soy admirador de ninguno. Sí tengo una muy buena impresión de Hoyos. Tuve la oportunidad de conversar con él y me pareció un tipo franco, sincero y buena persona. Con Guede nunca conversé.

¿Tiene miedo a que le manden espías a los entrenamientos, como denunció Palestino?

Es muy lejos. No llegan los periodistas, menos los espías. Sale muy caro. No tenemos ese problema.

Sí que tendrán problemas para retener a sus figuras. ¿Es posible retener a Caroca, por ejemplo?

Será difícil porque él ha hecho una gran campaña. Y me siento identificado con su campaña porque lo rescaté, lo traje, le di confianza y el Rafa ha sido un jugador importante en el equipo. Es un jugador destacado a nivel sudamericano.

¿Se equivocó Colo Colo dejándolo marchar?

No sé si se equivocó, pero creo que hoy él está al nivel para jugar en cualquiera de los equipos más importantes del fútbol chileno.

¿Y usted para qué está?, ¿cuál es su meta?

El sueño que tengo no es llegar a algún club en específico, mi sueño es que mis equipos jueguen bien al fútbol, donde sea.

¿Y se irá a México si sigue estando esa puerta abierta?

No lo sé. A mí sí que me gustaría irme afuera a dirigir, porque creo que los técnicos chilenos sí tienen capacidad para hacer grandes cosas afuera, a pesar de que nos cuesta tanto que nos vean. Si tengo la oportunidad de irme, me voy. He sido toda mi vida patiperro, no tengo miedo de irme a ningún lado.

Por último, ¿título nacional u octavos de la Copa?

Si me dieran a elegir, yo elijo obviamente el campeonato nacional. Sería el primero de la historia de Iquique, una estrella que no se borraría.