Novak Djokovic (1°) y Janko Tipsarevic (23°) llevaron a Serbia al triunfo ante Canadá por 3-2, que sitúa al conjunto balcánico por segunda vez en su historia, en la final de la Copa Davis, que disputará como local ante la República Checa.
Sin margen de error, Djokovic abrió la jornada del domingo ante Milos Raonic. El líder del cuarteto de Canadá, que buscaba sobre la tierra de Belgrado alcanzar por primera vez una final de la Davis, no tuvo opción ante el número uno del mundo.
Raonic mantuvo el tipo en la primera manga, con su servicio fresco, en la que firmó seis saques directos. Djokovic ganó el desempate y allanó el camino. Logró el triunfo por 7-6(1), 6-2 y 6-2 después de dos horas y 8 minutos.
La final quedó en manos de Tipsarevic, que no pudo ganar el primer encuentro individual el viernes, cuando cayó ante Raonic después de cinco sets y más de cuatro horas de lucha.
Tipsarevic se mostró más sólido que Vasek Pospisil, que vendió cara su derrota. Solo bajó el nivel en el segundo parcial, pero se aferró al partido hasta el final.
Tras dos horas y 56 minutos de encuentro y al quinto punto de partido, cerró el triunfo Janko Tipsarevic al ganar por 7-6(3), 6-2 y 7-6(6).
Serbia se medirá en la final ante el vigente campeón, la República Checa, que se impuso a Argentina por 3-2 en la otra semifinal. La lucha por el título será del 15 al 17 de noviembre.
El equipo serbio no llegaba al último tramo en la lucha por el título desde que logró el trofeo en el 2010, pero rentabilizó la fortaleza de sus jugadores para dar la vuelta a la ventaja con la que el cuadro canadiense cerró la sesión del sábado, tras imponerse en el partido de dobles.
