El gobierno de Shinzo Abe aprobó un nuevo paquete de estímulo por valor de 29.000 millones de dólares este sábado, en una apuesta por reactivar la economía de Japón, golpeada por una subida del IVA.

El paquete está diseñado para dar apoyo a la economía provincial, los pequeños negocios y el sector doméstico, así como para incrementar el gasto público en la reconstrucción de áreas golpeadas por desastres naturales.

"Con la rápida implementación de estas medidas, creo que podremos impulsar el consumo, ayudar a la economía provincial, y llevar el ciclo de crecimiento positivo a todos los rincones del país", aseguró Abe en un encuentro con legisladores, poco antes de que el gabinete presidencial aprobara oficialmente el paquete.

Y es que recientemente varios indicadores han mostrado cierta debilidad en la tercera economía mundial, después de que una subida del IVA en abril frenara el crecimiento nipón.

Desde su llegada al poder hace dos años, Abe ha puesto en marcha una serie de medidas favorables a los negocios y ha promovido el gasto, en una apuesta por sacar a Japón de la deflación. 

Sus esfuerzos han hecho bajar el precio del yen y han aumentado las ganancias de las grandes firmas niponas, particularmente de las exportadoras, pero sus críticos argumentan que esas políticas no han beneficiado al pequeño negocio ni al consumidor, y que los salarios se han reducido.