El Gobierno de Japón está estudiando la posibilidad de tomar el control de las cuentas bancarias que no hayan registrado movimientos en diez o más años y destinar el dinero a la reconstrucción del noreste del país,una de las zonas más afectadas por el tsunami de 2011, según informó hoy el diario económico Nikkei.

Las instituciones financieras de Japón establecen que una cuenta está "en letargo" si durante al menos diez años no ha registrado movimientos ni se ha podido contactar con su titular, detalló el medio. Se calcula que este tipo de cuentas "generan" anualmente unos 80.000 millones de yenes (unos 776 millones de euros), y el Gobierno evalúa la posibilidad de destinar estos fondos a proyectos de reconstrucción de las zonas asoladas por el devastador tsunami de 2011 y a organizaciones sin ánimo de lucro.

Sin embargo, según Nikkei, algunos bancos rechazan la propuesta porque sostienen que el Ejecutivo no tiene autoridad para utilizar los fondos de sus clientes aunque las cuentas estén aparentemente inactivas. Paralelamente el vocero del Gobierno japonés, Osamu Fujimura, señaló que "es necesario que el dinero fluya de forma suficiente y regular para permitir que las empresas y la economía nipona puedan recuperar la vitalidad y expandirse" indicó el portavoz del Gobierno, según la televisión pública NHK.

No obstante, Fujimura reconoció que se trata de un plan "muy difícil" de poner en marcha ante la divergencia de opiniones.

Según la agencia EFE, la idea busca contribuir a financiar la reconstrucción que afronta el devastado noreste del país tras el terremoto y tsunami de marzo del año pasado, una labor para la que ya se han aprobado cuatro presupuestos extraordinarios por más de 20 billones de yenes (más de 194.000 millones de euros).

Se trata de la primera vez desde 1947 -cuando Japón se encontraba en plena posguerra- que el país da luz verde a cuatro presupuestos extraordinarios en un mismo ejercicio.