El actor español Javier Bardem, ganador de un Oscar por No Country for Old Men, criticó la escasa producción cinematográfica que existe actualmente en España y lamentó que sólo se invierta en televisión.
"Se produce prácticamente sólo para televisión. Yo encuentro trabajo mucho más fácilmente en Estados Unidos que en España o Europa", dijo en una entrevista que publica hoy el diario alemán Frankfurter Rundschau con motivo del estreno en Alemania de Come, Reza, Ama, la última película de Ryan Murphy (Glee).
Según él, España está cosechando enormes éxitos en el deporte, algo que le alegra sobremanera, pero "lamentablemente", no ocurre lo mismo con la industria cinematográfica.
"Cuando yo empecé en España hace 20 años, se rodaban muchas películas, gracias también al pionero Pedro Almodóvar", subrayó en la misma entrevista, en la que una vez más, reiteró que no cree en Dios, sólo en Al Pacino, actor que merece su "mayor respeto y admiración".
De hecho, recordó que Al Pacino lo llamó una noche después de ver su película Before night falls (Antes que anochezca) para felicitarlo y dejó un mensaje en el contestador automático. Ese mensaje "es como mi talismán", dijo. "Incluso si lo hizo sólo por amabilidad. Me pareció genial".
Bardem hizo referencia por otra parte a algunos episodios de su vida, como a aquel en el que le rompieron la nariz, cuando tomaba algo tranquilamente con sus amigos. Sin embargo, esa nariz imperfecta le dejó para siempre un aspecto similar al de Marlon Brando, señaló.
"Marlon Brando es el más grande. Logró cambiar el rostro de la actuación de una vez por todas", agregó.
Por otra parte, reveló que como actor, nunca deja de formarse y cada año acude durante tres meses a su antigua escuela de arte dramático de Madrid para "volver a estar en forma".
"Para mí es importante borrar todos esos manierismos, gestos estandarizados y expresiones que se le pegan a un actor", explicó. "Me renuevo anualmente, por decirlo de alguna manera".
Bardem reconoció que le encantó rodar Come, Reza, Ama, junto a Julia Roberts, la "novia de América", que da vida a la escritora estadounidense Liz Gilbert en su viaje iniciático por Roma, la India y Bali en busca de los placeres de la vida, la meditación y el equilibrio personal.
"Intento cambiar de género cuando tengo la oportunidad. Después de ese asesino brutal en 'No country for old men' ('No es país para viejos'), o el papel de inquisidor en 'El fantasma de Goya', me alegré mucho de poder interpretar a un hombre romántico y deseado".
"Detesto toda forma de violencia, ya sea en el cine o en la realidad", dijo explicando que participó en la película de los Cohen sólo cuando entendió que se trataba de una crítica mordaz a la violencia.
Entre sus gustos, el español se declaró un admirador empedernido de Goya y reveló que una de las pocas cosas de las que no podría prescindir en la vida sería de la música. "Soy fan absoluto del heavy metall", dijo. "Me gustan AC/DC, metallica, Pearl Jam y Iron Maiden. Pero también escucho otra música", culminó.