El poderoso jefe del Ejército de Egipto, Abdel Fatah al Sisi, dejó claro que presentará su candidatura a las elecciones presidenciales de su país.
"Si la mayoría quiere mi candidatura para la presidencia, no puedo obviarlo", dijo el mariscal de campo durante una ceremonia de graduación de militares en El Cairo, informó hoy la agencia estatal de noticias Mena. Las formalidades necesarias se emprenderán "en los próximos días", agregó.
Por ahora no se ha fijado la fecha de las elecciones presidenciales, pero probablemente tendrán lugar antes del verano (boreal). La cita con las urnas es necesaria porque el Ejército, con Al Sisi a la cabeza, depuso en julio del año pasado al presidente elegido en las urnas en 2012, Mohamed Morsi.
El golpe de Estado estuvo precedido por protestas multitudinarias por el estilo dictatorial del islamista Morsi al gobernar. Tras ser apartado del poder, Morsi fue encarcelado al igual que casi toda la cúpula de los Hermanos Musulmanes.
Seguidores y aliados del militar, así como grandes medios de comunicación han ensalzado en los últimos meses a Al Sisi como un héroe del pueblo. El jefe del Ejército ha dejado entrever en varias ocasiones que podría concurrir a la presidencia, pero las palabras de hoy han sido lo que más se aproxima a un anuncio.
Para participar en la carrera de las presidenciales, Al Sisi tendrá que dejar el Ejército. Tampoco podrá seguir al frente del Ministerio de Defensa, del que actualmente es titular.
El presidente interino Adli Mansur podría aprobar en los próximos días la ley que regula la elección presidencial. Los juristas analizaron el último borrador y durante la noche del lunes al martes la devolvieron a Mansur. Cuando la ley esté terminada, la comisión electoral podrá presentar una fecha para la votación y registrar a los candidatos.
Hasta la fecha, el único que ha manifestado su intención de concurrir es el ex candidato presidencial Hamdien Sabahi, que representa al sector de la izquierda.
En tanto, un tribunal de El Cairo ordenó hoy en un juicio rápido el cese de todas las actividades en Egipto de la organización radical islámica Hamas, informó el portal de noticias próximo al gobierno "Al Ahram".
Según la información, el tribunal decidió además cerrar la oficina de Hamas en El Cairo.
El movimiento radical islámico de Hamas controla la Franja de Gaza, limítrofe con Egipto. La organización es una ramificación de los Hermanos Musulmanes.
En varios de los procesos judiciales contra Morsi, entre otros por espionaje y traición, hay también cuadros de Hamas imputados. El máximo representante de la organización palestina en El Cairo es el vicepresidente de Hamas, Mussa Abu Marsuk. Hace unos días dio una entrevista a la televisión egipcia en El Cairo.