La gran cantidad de musulmanes radicalizados en toda Europa, su falta de estructura de mando y su creciente sofisticación hacen "extremadamente difícil" que las fuerzas de seguridad puedan evitar todos los atentados terroristas, señaló hoy el jefe de la agencia policial europea Europol, Rob Wainwright.

Además indicó que Europa necesita cooperar más estrechamente para impedir ataques como los mortales atentados de la semana pasada en París.

"La escala del problema, la naturaleza difusa de la red, la cantidad de personas implicadas en esto hacen extremadamente difícil que incluso agencias anti terroristas que funcionan muy bien, como las que tenemos en Francia, impidan todos los atentados", manifestó Wainwright.

Y destacó que al menos 2.500, y quizá hasta 5.000 sospechosos, han viajado desde Europa a conflictos en Siria e Irak.