La mujer estadounidense acusada de participar en un presunto plan para asesinar al dibujante sueco Lars Vilks, quien en 2007 publicó una caricatura de Mahoma y causó el enfado del mundo musulmán, se declaró hoy no culpable de los cargos.

Colleen LaRose, de 46 años y apodada "Jihad Jane", compareció en una corte federal de Filadelfia, en Pensilvania, en la que fue su primera aparición pública desde que su caso saltó a la luz pública.

Durante los dos minutos y medio que estuvo frente al juez Lynne A. Sitarski, la acusada, que vestía un uniforme verde de presa, estuvo estática y sin manifestar ninguna emoción cuando se declaró "no culpable", informó el Philadelphia Inquirer.

La acusada permanecerá bajo custodia federal hasta que se lleve a cabo su juicio, que el juez fijó para el próximo 3 de mayo.

En declaraciones a la prensa, su abogado defensor, Mark Wilson, no hizo ningún comentario sobre la salud mental de su cliente y señaló que ninguno de sus familiares o amigos estuvo en la audiencia.

LaRose, natural de Pennsburg, Pennsylvania, fue arrestada en octubre y su caso fue mantenido en secreto por las autoridades, que investigaron su presunta relación con un grupo islámico en Internet que se había propuesto asesinar al dibujante.

El caso no se supo hasta el 9 de marzo, cuando las autoridades hicieron pública la acusación de un gran jurado que le imputa cuatro cargos.

Según los documentos de la acusación, LaRose fue reclutada en Internet por un hombre que promueve la "guerra santa" en el sur de Asia y en Europa.

La acusada se fue a Europa en agosto pasado para llevar a cabo su misión sin decir nada a su novio, Kurt Gorman, quien continúa viviendo en el mismo apartamento que compartían.

LaRose volvió a Estados Unidos a mediados de octubre, cuando el FBI la detuvo en el Aeropuerto Internacional de Filadelfia y desde entonces permanece en prisión.

Su caso está vinculado con el arresto en Irlanda de siete personas -cuatro hombres y tres mujeres- por supuestamente planificar el asesinato de Vilks. Una de ellas es otra mujer estadounidense identificada como Jamie Paulin Ramírez, de 31 años.

Según la acusación, LaRose escribió el pasado 30 de septiembre un correo electrónico en el que aseguraba: "Sólo la muerte podrá pararme, estoy muy cerca del objetivo" y manifestaba que sería "un honor y un gran placer morir o matar", informa Los Ángeles Times.

Y es que su aspecto de mujer blanca, rubia de ojos azules, como ella misma dijo, le permitirían "mezclarse con mucha gente" y evitar que la detectaran como una terrorista.

La acusación no la vincula a ninguna organización terrorista, pero las autoridades federales señalan que utilizó Internet para reclutar otros jihadistas y pedir financiación.

Gorman señaló a la prensa su sorpresa cuando se enteró de que su novia estaba envuelta en un complot terrorista y aseguró que no sabía ni siquiera que tuviera simpatías por el mundo musulmán.