Joan Barreda fue protagonista ayer, pero tiene claro que está en el Atacama Rally para ganar experiencia en el desierto chileno, más que para otra cosa. "Ya sabíamos a lo que veníamos, que iban a ser etapas exigentes, con temperaturas y terrenos desérticos y muchos kilómetros. Son etapas muy duras, con muchas horas arriba de la moto", cuenta.

¿Es válido si no viene con la misma moto que va a utilizar en el Dakar?

Es valorable conocer un poco más este desierto, familiarizarse con el tipo de terreno siempre es bueno y cogiendo el feeling con las rutas, siempre va a ayudar.

Este año tuvo un buen Dakar. ¿En 2015 el objetivo es ganarlo?

Sí. Este año en la primera semana perdimos casi 40 minutos por un problema mecánico, pero continuamos luchando cada día, ganando etapas, no dejamos de intentarlo aún teniendo el segundo puesto prácticamente asegurado. El próximo año será algo parecido, claro que con una moto más desarrollada, un equipo más compacto y con más experiencia, pero la mentalidad será la de salir por la carrera.

En general, le fue bien a todo el equipo Honda.

Hicimos cosas muy buenas, pero al final en cuanto a resultados no salió bien, pero se vio mucho potencial, hay un trabajo que habíamos realizado durante el año y aún así era el primero con una moto nueva, de un equipo recién formado. Todos esos pequeños detalles, en una carrera de 15 días como el Dakar, acaban saliendo a la luz. Este año hemos intentado en esos dos sentidos, la seguridad de la moto y  la reestructuración del equipo.

¿Qué errores se detectaron y que cambios relevantes se hicieron?

Un cambio importante es la llegada de Jeremías Israel. Y después, en cuanto al personal, los mecánicos, cambió el manager, Wolfgang Fischer, que tenía en Speedbrain. Al final, lo importante es formar un equipo compacto, que sabes que está ahí, donde uno sienta que todo está donde tiene que estar.

Tiene 31 años. ¿Por cuánto tiempo se proyecta en el cross country? ¿Le gustan otras disciplinas?

Vamos a tratar de aguantar lo todo lo que se pueda, pero dependerá mucho de cómo vaya la carrera deportiva y ojalá dure unos cuantos años, porque es algo que me gusta, me apasiona, que trabajo día a día.

Se dice que usted es el recambio de una generación dominada por Marc Coma y Cyril Despres. ¿Lo siente así?

Es un orgullo que lo valoren así, pero he intentado desde siempre hacer mi carrera deportiva y apostar por mi filosofía y así lo he hecho en los últimos años, con sus pros y sus contras. Y ahora con más experiencia voy a seguir mi línea de trabajo.

¿Cómo ha visto la situación de Chaleco López?  

En Marruecos lo vi bien. Allá los europeos tenemos un poco más de tradición y facilidad para correr, a los sudamericanos les cuesta un poco más. Quiero que esté en el Dakar. Aún hay dos meses y seguro que sacará fuerzas y lo tendremos. Que vayan todos los pilotos hace esa carrera aún más grande. Ojalá se recupere y se anime.