Las propuestas de John Galliano para Christian Dior, en la inauguración de la Semana de la Alta Costura Otoño-Invierno 2010-2011 en París, estuvieron basadas en una colección inspirada en el universo floral.
Realizado en una carpa situada en el parque del museo Rodin, el desfile de Dior parecía una feria de jardinería, incluso tratándose de moda para la temporada fría.
Independiente de la crisis que golpeó fuerte a la moda, la Semana de la Alta Costura de París sigue siendo un escaparate que deja boquiabiertos a todos los amantes del buen diseño.
El diseñador John Galliano, fue el primero en dar la nota en estos desfiles, con un show a modo de homenaje a la famosa línea tulipán que Christian Dior lanzó en 1953.
El diseñador, en esta ocasión, se inspiró en el universo floral, en los colores ocres de las hojas caducas que caen sobre los campos otoñales, entregando diseños que recrean las formas de los pétalos tanto en el patrón de las prendas, como en el corte de los tejidos.
Galliano mostró faldas en forma de cáliz que parecían claveles blancos, tulipanes con punta, o bien se juntaban como pétalos en capas de género, decoradas con motivos de orquídeas pintados a mano.
Pero para que el resultado final en pasarela no fuera demasiado acicalado, envolvió las cabezas de las modelos en folio -como si fueran ramos de flores para regalar- y les hizo peinados con los que parecían cactus.
La actriz norteamericana Blake Lively (de la serie Gossip Girls) contemplaba el desfile desde la pasarela, engalanada con un adorno de plumas blanco en forma de flor, mientras su colega Jessica Alba prefirió una imagen más discreta con peinado alto.