Johnny Herrera debió enfrentar un período de reclusión nocturna, luego de que fuera acusado de estar manejando pese a estar inhabilitado. Pero el arquero de Universidad de Chile lo tomó con tranquilidad, alegando que prefirió no ir a juicio y aceptar ese acuerdo con la fiscalía.

"Fue un tirón de orejas por algo en lo que ni siquiera estaba envuelto. Me acusa un 'gallo' que supuestamente estaba manejando y luego se desdice. Sólo por el tema de evitar ir a juicio llegué a un acuerdo con la fiscalía y se optó por esa medida", dijo en declaraciones a radio Cooperativa. Y agregó con humor que "estaban contentas mi mamá y mi polola".

Además, expresó que estaba dispuesto a participar a una campaña de prevención de accidentes de tránsito, aunque dijo no sólo debía orientarse a los conductores, apuntando al accidente de 2009 en el atropelló a Macarena Casassus, quien falleció. "Una campaña generalizada, no sólo al condutor. Cuánta gente que cruza por lugares que no corresponde. A mi la alcoholemia me salió 0 y a la persona del accidente 2,4".

Pero también volvió a criticar al estadio Monumental. "Es reiterativo. Esta última vez a vista de todos lanzaron hasta excremento, pañales... Eso no se ve en ninguna parte del mundo, ni el barrio, ni cuando jugada en Angol", dijo

El portero agregó que "es triste que el estadio de uno de los equipos más populares tenga ese tipo de inconvenientes. La penúltima vez casi me cogotearon a la salida del camarín. Es dificil, es su forma de ser, el colocolino es así, qué le vamos a hacer".

Herrera insistió en que "en el clasíco anterior casi me cogotearon saliendo del camarín, sentí que me tiraban la mochila. Ese nivel de vandalismo es repugnante, no sólo deja mal al fútbol chileno, sino que al país".

Respecto del futuro de la U y Martín Lasarte, Herrera dijo que "él es nuestro técnico hoy. Todavía nos quedan desafíos importantes, si sigue acá o no, no hay nada más bonito para un técnico o futbolista que irse campeón".