El hijo del matrimonio Luchsinger Mackay, Jorge Luchsinger, en su condición de querellante en la causa, presentó el martes una solicitud de audiencia de cautela de garantías, para que sea el tribunal el que encargue un examen de salud a la machi Francisca Linconao y así determinar si se debiera cambiar su medida cautelar de prisión preventiva a arresto domiciliario.
De determinarse que sus condiciones de salud no son aptas para que esté bajo esa medida cautelar, Luchsinger no se opondría a que se modifique la prisión preventiva. "No nos hemos opuesto en otras circunstancias, como cuando se ha solicitado asistir a alguna ceremonia religiosa, o acudir al hospital, por lo que no tendríamos por qué oponernos a que se modifique la cautelar si es que se determina su estado de salud", señaló.
Además, el querellante señaló que la fiscalía cuenta con los antecedentes necesarios para llevar a juicio oral a la machi Linconao, como también a los otros 10 acusados en la causa. "Para que se modifique una cautelar a una menos gravosa, los abogados defensores deberían presentar antecedentes nuevos que ameriten modificar la cautelar. Sin embargo, no se han presentado nuevos datos, por lo que los tribunales han ratificado la prisión preventiva, ya que han considerado que hay datos suficientes para mantener esa condición", manifestó el agricultor.
Luchsinger Mackay explicó que están abiertos a la modificación de cautelares, pues "queremos saber la verdad y que se haga justicia, no queremos venganza, por lo tanto, esperamos que se acrediten los medios de prueba necesarios en el juicio".