La imagen registrada el miércoles, en el salón VIP del AFG Arena de Sankt Gallen, entre Sergio Jadue, los otros integrantes del directorio y Jorge Segovia no hizo más que ratificar que el propietario de Unión Española no ha perdido su poder dentro de la cúpula del fútbol chileno.
Su intervención, así como el llamado hecho desde Chile por el secretario general Nibaldo Jaque, resultó vital para sellar la suerte de Claudio Borghi en los mismos camarines del recinto helvético, sólo 30 minutos después de la quinta derrota consecutiva de la Selección.
Sólo 10 minutos de diálogo, en los que se le vio muy activo para expresar su opinión, le bastaron al hispano para convencer a Jadue de que el crédito del entrenador estaba completamente agotado. La voz del empresario fue vital para doblarle la mano al calerano respecto a los plazos del despido de Borghi, teniendo en cuenta que el timonel de la asociación pretendía dar a conocer la noticia hoy, al regreso de la delegación a Santiago.
El mensaje del hispano era claro, ya que para él había que actuar rápido y dar una potente señal. Además, apuntaba a que no había tiempo para errores y que la situación no daba para más. Esos fueron algunos de los argumentos expresados por Segovia que sellaron el futuro del entrenador.
ALEJAMIENTO OBLIGADO
Tras imponer su opinión, el dirigente español aguardó junto con los otros directores que viajaron a Suiza, Jadue y Mauricio Etcheverry, quienes fueron los encargados de traspasar la noticia al cuerpo técnico en el recinto deportivo.
Horas más tarde, en Zurich y sin haber tenido ningún contacto con el plantel y el saliente DT, Segovia tomaba un activo rol en la conformación del perfil que definirá al nuevo adiestrador de la "Roja".
La cercanía mostrada por el madrileño desde la reunión sostenida entre el directorio y Borghi, el 22 de octubre, contrasta con el extenso período que el empresario pasó fuera del país, debido a problemas con la salud de su padre en España y a varios negocios personales. Dichos factores aumentaron los rumores de una eventual salida del ibérico en marzo de 2013, situación que traería varios cambios en Quilín.
Durante ese período, el ex presidente de Unión Española siguió a distancia los diferentes temas de discusión del directorio de Quilín, el Instituto Nacional del Fútbol (INAF) y el Canal del Fútbol (CDF). Segovia aplicó lo mismo para su club, pues decidió descansar en el trabajo del timonel José María Llorente y su cuñado, el dirigente Santiago Perdiguero.
Por estas razones, su presencia en Suiza, sede de la FIFA, justo en medio de la crisis desatada por los malos resultados de la "Roja", fue vista como una potente señal de autoridad.
EN BUSCA DEL DT
Por ahora, y antes de definir su futuro, Segovia tendrá un importante rol en la búsqueda del reemplazante de Borghi, no descartando, incluso, que lidere algunas negociaciones, tal como en febrero de 2011, en la llegada del "Bichi". En aquella oportunidad, el hispano contactó a su compatriota Rafael Benítez y al sueco Sven-Göran Eriksson. Para Jadue, que el español recupere este rol no es sinónimo de un debilitamiento de su gestión, sino que es reflejo de un directorio que espera tomar decisiones consensuadas y que puedan sustentarse en el tiempo.