Jorge Valdivia fue el protagonista de la sesión de entrenamiento del Palmeiras, pero por las peores razones. El volante nacional se enfrascó en una acalorada discusión con su compañero de equipo, el portero Bruno, y de no ser por el resto del plantel, pudiueron incluso llegar a los golpes.

La tensa situación se vivió cuando se realizaba el trabajo de fútbol reducido en la práctica matutina. El "Mago" reaccionó a una jugada del meta, y a partir de ese instante toda interacción se volvió cada vez más aspera.

A medida que pasaban los minutos, la discusión fue subiendo de tono hasta que el resto de los compañeros debieron separarlos cuando los golpes parecían ser inevitables.

De todas formas, el entrenamiento siguió su curso, y de hecho los jugadores intercambiaron palabras y se les pudo ver corriendo juntos por el césped. "¿Pelea? Ninguna pelea", señaló Valdivia, en tono irónico.