El último partido que Jorge Valdivia disputó con la Selección fue en octubre de 2011 frente a Perú, en el estadio Monumental. Curiosamente, su reestreno con la camiseta nacional, 17 meses después, se podría producir frente al mismo rival. Cosas del destino que le llaman algunos.
"La verdad es que no me había puesto a pensar en ese detalle. Pero más allá de esta casualidad, lógicamente que lo que más me importa, y lo que me tiene más feliz, es que por fin estoy de regreso. Estar tanto tiempo fuera de la Selección es algo difícil de explicar", confiesa el mediocampista de Palmeiras, quizás el nombre más llamativo en la lista que entregó el pasado jueves Jorge Sampaoli para enfrentar los próximos dos duelos eliminatorios, previstos para el 22 y 26 de marzo.
Con la convocatoria del mediocampista de Palmeiras, se cierra de algún modo el capítulo del "Bautizazo", que le costó una sanción a cinco futbolistas. De todos ellos, sólo Valdivia no había aparecido en alguna convocatoria desde aquel episodio. "Cuando salió mi nombre en la lista, muchos amigos me llamaron para felicitarme. También leí algunas declaraciones de otros que sin tener la obligación de hacerlo, hablaron muy bien de mi regreso. Les agradezco a todos".
¿Se le pasó por la cabeza que no volvía nunca más a la Selección?
A ver. Tenía claro, y lo expresé el año pasado, que mientras estuviera el anterior cuerpo técnico, no iba a regresar. Entonces, en ese contexto, no tenía sentido calentarme la cabeza con que si iba a volver o no algún día. Preferí concentrarme en Palmeiras todo este tiempo y seguir por televisión los partidos de la Selección.
Pero pasaron 17 meses de su último partido, tiempo suficiente, quizás, para pasar al olvido.
Eso depende del punto de vista de cada uno. A lo mejor mucha gente no me quería de regreso. No lo sé. Yo me quedé tranquilo cuando hablé con Jorge Sampaoli, en enero. Ahí fue muy claro conmigo. Me dijo que dependía de mí si volvía a la Selección. Si estaba jugando y físicamente no tenía problemas, volvía a ser una alternativa para aparecer en una convocatoria. Eso no ocurría con el anterior cuerpo técnico. Estando bien o mal, no me iban a llamar.
¿Vuelve picado a la Selección, por todo lo que se dijo y se habló de usted en este tiempo?
Después de que pasaron tantos meses de mi último partido, no estoy pensando en lo que se publicó o se dijo sobre mi. Yo estoy disfrutando esta convocatoria como si fuera la primera. Nunca he sido rencoroso. No voy a la Selección en busca de una revancha ni mucho menos. Quiero estar en buena forma y ser una alternativa para el técnico.
La última vez que vino a la Selección precisamente hizo todo lo contrario. No se preparó de la mejor manera y terminó siendo castigado junto a otros cuatro compañeros.
Parece que nunca podremos mirar hacia adelante. A ver, tengo asumido que se tocará esa tecla durante todos estos días antes del partido con Perú. Pero lo que pasó, pasó. Se me sancionó, pagué y cumplí. Ahora vuelvo con todas las ganas de ser un aporte y demostrar que estoy para jugar por mi país si lo decide el técnico. ¿Tanto cuesta mirar hacia adelante?
Algunos ven en esta convocatoria su última oportunidad en la Selección.
¿Cómo mi última oportunidad?
Si vuelve a cometer otro acto de indisciplina, no regresa más.
Y volvemos a lo mismo. Creo que Jorge (Sampaoli) fue muy claro en su primera conferencia de prensa como técnico de la Selección. Dijo que todos partían de cero y que sus convocatorias se iban a basar en el rendimiento que cada uno tuviese en su club. Y creo que eso pasó ahora. Además, cuando hablamos, quedaron claras las reglas. Mi compromiso con la Selección y con él es absoluto. Para qué quieren buscar más polémicas. No tengo ninguna intención de armar una.
Pero no siente que estará bajo observación permanente.
Si me pongo a pensar en todas esas cosas, al final me voy a distraer. Llevo bastante tiempo en el fútbol y sé cómo se maneja cada uno. Te insisto, vengo a disfrutar de la convocatoria y a tratar de ser un aporte. Si no, me quedo en Brasil. Mis ganas de entrenar y jugar por la Selección son muchas.
Conversación pendiente
En enero, en la charla que sostuvo con Jorge Sampaoli en Juan Pinto Durán, el volante supo que para estar en esta convocatoria debía sumar minutos. Más allá del aprecio futbolístico que siempre le tuvo el casildense, la condición para ser considerado era tener continuidad en Palmeiras.
"En algún momento me vi contra el tiempo, porque a fines de enero jugué poco más de media hora y me lesioné. Estuve un par de semanas parado antes de volver contra Libertad de Paraguay en la Copa Libertadores. Ahí jugué un tiempo completo. Ya me sentía mejor, pero no sabía si eso iba a alcanzar para ganarme la convocatoria", reconoce Valdivia.
Da la impresión de que el partido con Tigre, donde jugó los 90 minutos, terminó por convencer a Sampaoli.
No sé si lo terminó por convencer, pero sí creo que influyó. Además, el hecho que estuviera él en el estadio le dio una impresión más amplia de mi rendimiento. No es lo mismo ver un partido por televisión que en vivo. Creo que jugué bien, pero sobre todo aguanté físicamente los 90 minutos. No era una cancha fácil ni un rival que te dejara jugar, pero me sentí bien. Ahora, tengo más partidos para sumar minutos y llegar de buena manera a la Selección.
Si no jugaba el partido completo contra Tigre, ¿cree que lo hubiesen llamado?
Difícil saberlo, porque hasta el partido con Perú todavía tenía tres partidos con Palmeiras para sumar minutos y alcanzar mi mejor forma. Sí, te repito, influyó el hecho de haber aguantado los 90 minutos a un nivel de exigencia alto.
Mucho se habla de su regreso a Juan Pinto Durán. El año pasado confesó que varios compañeros le dieron la espalda y otros lo atacaron por la prensa. ¿Hay conversaciones pendientes?
No creo que ese tema sea algo primordial. La verdad es que no creo que haya que tener una conversación con nadie. No tengo problemas con ningún compañero.
Pero usted mismo reconoció que estuvo molesto, por ejemplo, con Mauricio Isla.
Pero volvemos a lo mismo. No me interesa polemizar con nada ni con nadie. Para qué hacer un problema con algo tan simple. Si hay que conversar sobre algún tema con un compañero, lo haré si se da la oportunidad. Pero yo voy a la Selección a entrenar y si se da la oportunidad, jugar. Lo que menos me preocupa es ese tema.
¿Cómo será el reencuentro con Johnny Herrera?
¿Qué pasó con él?
Tuvo un fuerte encontrón en un "Superclásico" hace un tiempo.
Esa pelea fue en 2005 y ese mismo año éramos compañeros en la Selección. Viste que muchos de los problemas los inventa la prensa.
Pero cuál es el invento. Casi se van a las manos.
Pero fue hace ocho años. Las polémicas nacen en la prensa. Los jugadores no hemos dicho nada y ya anticipan roces. Te repito, vengo con la mejor disposición. No voy a armar ninguna polémica. No me interesa. Estoy en otra. Para qué comentar algo que no existe.