José Mourinho evitó entrar en polémicas tras el empate con el Espanyol que le dio el título de la Liga al Barcelona, y solo se sumó a las felicitaciones para el elenco dirigido por Tito Vilanova.

"Felicito al Barça por la Liga. La competición tiene un nuevo campeón y es lo mínimo que podemos hacer", señaló, una vez terminado el encuentro en que no pudo encontrar la victoria con un equipo alternativo en cancha, pensando en la próxima final de la Copa del Rey ante el Atlético de Madrid.

El técnico también debió abordar la situación al interior del camarín, ante las constantes preguntas sobre si Pepe estaba apartado del equipo tras defender a Casillas. El portugués indicó que "no es relevante hablar de Pepe ahora. Son decisiones mías y punto. Desde el primer día hasta el último yo decidiré, algunas veces compartiré mis motivos y otras no".

La situación del central es delicada, pues el joven defensa francés Varane sufrió una lesión en el inicio del encuentro ante los blanquiazules y las alternativas del banco se reducen para la final ante sus coterráneos.

Mourinho apuntó que la lesión de Varane "tiene alguna gravedad, aunque no quiero adelantarme a los médicos". De todos modos, el luso afirmó que el central "no tiene posibilidad de jugar la final de Copa y tampoco el resto de partidos, pero tenemos alternativas, es un encuentro que todo el mundo quiere jugar".