Paulina Rubilar (22), la estudiante de sociología de la Universidad de Concepción, que resultó herida en su ojo derecho en la protesta nacional de estudiantes del pasado jueves, emitió hoy una declaración pública en la que fuertemente condena lo ocurrido y asegura que "esperaba que me dispararan".
La estudiante relata los hechos de manera cronológica. "Luego de participar en la marcha estudiantil me dirigí rumbo a la universidad a buscar mi bicicleta, ya que la dejé amarrada, para mayor seguridad (…) a los pocos minutos de encontrarme dentro del campus, las Fuerzas Especiales de Carabineros hacen ingreso de forma ilegal, agrediendo de manera desproporcionada (…) pasados los minutos, y al vernos acorralados por las fuerzas especiales, se inicia una persecución dentro del campus (…) en medio de estos acontecimientos de descontrol policial, cuando decido salir por una vía alternativa (un costado de la plaza del estudiante). Justo en ese momento, un piquete de fuerzas especiales se dirige directamente hacia mí, se detiene a una distancia de no más de veinte metros, se agrupa, y un efectivo me apunta directamente con la escopeta, disparándome en pleno rostro".
Rubilar explica que en ese momento cae de su bicicleta, "toco mi rostro y palpo la sangre que comienza a salir de mi ojo derecho, escucho como carabineros se mofan de mí, y acto seguido, viendo mi condición de herida, pasan de largo ignorándome, todo esto a vista de cientos de personas que estaban en el lugar".
Ayer fuentes del Hospital Regional de Concepción confirmaron que durante el aseo quirúrgico que recibió la estudiante, se pudo detectar una mezcla de tierra y restos de componentes de la bomba de gas lacrimógeno.
La estudiante sigue su declaración, indicando que una vez ya en el hospital para ser atendida, "cinco efectivos de Fuerzas Especiales de Carabineros se hicieron presentes en la sala de urgencia del hospital, custodiándome y, cuando se les preguntó sobre lo ocurrido, manifestaron su total desconocimiento de los hechos, siendo ellos mismos los que habían participado escasas horas atrás del operativo que casi me deja sin visión".
"Desmiento de manera rotunda todo lo dicho hasta este minuto por Carabineros, fueron ellos, y no otra cosa, los que dispararon sobre mí, los que me apuntaron, se burlaron y me abandonaron sin prestarme auxilio, una constante habitual en su accionar de delincuentes con uniformes", sentencia la joven.