"Héroe" o "ellos te asesinaron" fueron algunas de las consignas gritadas hoy por los cientos de asistentes a los funerales del jubilado griego que se suicidó días atrás, acosado por problemas económico.

Dimitris Christoulas, jubilado farmacéutico de 77 años, se quitó la vida ante el Parlamento y dejó cartas en las que apuntó a la ferocidad de los recortes y ajustes del gobierno de Lucas Papademos.

"No he hallado ninguna otra forma de luchar excepto un fin digno, antes que empezar a buscar comida en la basura", denunciaba en su nota de suicidio, en la que hacía un llamado a los jóvenes a levantarse, tomar las armas y ahorcar a los "traidores de la nación".

Amigos y familiares de Christoulas dieron lectura a poemas y cartas durante el funeral.  "Padre, no pudiste soportar que asesinaran la libertad, la democracia y la dignidad", se lamentó Emmy, hija de 43 años del hombre fallecido. 

"Has pagado con tu sacrificio. Ahora es nuestro turno. Padre (...). Somos hoy tantos porque 'somos once millones y nuestro nombre es Resistencia'", añadió en referencia a la nota de su padre.

Tras el acto, los asistentes marcharon hasta el árbol junto al que se suicidó Christoulas en la plaza Sintagma, que se ha convertido en una especie de santuario con guirnaldas, velas y notas de recuerdo para el hombre.

Los asistentes aplaudieron y gritaron consignas antigubernamentales mientras el ataúd de Dimitris Chrisoula era trasladado al cementerio principal de la capital griega.  La semana próxima será trasladado a Bulgaria e incinerado, según sus propios deseos.