Juez cierra caso Aerocontinente y sobresee a hermanos Zevallos

La resolución se debe a que están en rebeldía y que los tribunales chilenos solicitaron, sin éxito, su extradición.




A nueve años de que comenzara en Chile la investigación contra Lupe y Fernando Zevallos por narcotráfico y lavado de dinero, el juez Víctor Montiglio cerró el sumario y decidió sobreseer a los hermanos dueños de la aerolínea Aerocontinente.

Ambos empresarios están en Perú. Lupe Zevallos, en libertad y su hermano Fernando en prisión. Ambos enfrentan procesos a raíz de las acusaciones de usar esta aerolínea como fachada para transportar cocaína de alta pureza proveniente del cartel de "Los Norteños", liderados por los hermanos López Paredes.

La razón por la cual fueron sobreseídos se debe a que están en rebeldía y a que los tribunales chilenos solicitaron, sin éxito, su extradición. La razón: ambos tienen procesos pendientes en su país.

Fernando Zevallos enfrenta una condena de 20 años de cárcel en Perú por narcotráfico, la que terminará de cumplir en 2025.

Según los antecedentes de la justicia peruana, Fernando Zevallos aparece vinculado con el tráfico desde 1982 a través de su empresa Tausa. En 1992 creó Aerocontinente con un aporte de US$ 1.400.000 por parte de los López para que adquiriera el primer avión.

En 1999 llegaron a Chile para ingresar al mercado de la aeronavegación. Dos años más tarde, el Consejo de Defensa del Estado (CDE) y la Brigada Antinarcóticos de  Investigaciones llevaron a cabo la "Operación Icaro" que concluyó con la detención de cuatro ejecutivos y la incautación de cinco aviones.Sin embargo, más tarde la Corte Suprema dejó sin efecto el embargo a los bienes avaluados en US$ 11 millones.

El ministro Montiglio también dictó acusación en  contra de los colaboradores en Chile de los Zevallos por los delitos de asociación ilícita para el lavado de dinero y aprovechamiento de bienes provenientes del narcotráfico.

Los acusados son el peruano Máximo Zadi Desme Hurtado y los socios chilenos  de la aerolínea,  el abogado Ricardo Schomburgk Ugarte y el piloto Félix González Díaz.

"Terceras personas conformaron en Chile una organización destinada a aprovechar bienes y dinero provenientes del tráfico de estupefacientes en el extranjero. Los hechores, a sabiendas de que los aviones y recursos fueron obtenidos por la perpetración de este delito, participaron de su aprovechamiento en Chile", señala la resolución.

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