El pleno de la Corte de Apelaciones de Santiago decidió sobreseer al ex juez de garantía Daniel Urrutia quien fue sumariado por auto-agendarse una audiencia tras una visita de cárcel realizada antes de las elecciones Municipales del año pasado.
En voto de mayoría, los ministros del tribunal de alzada capitalino rechazaron formularle cargos como habían propuesto quienes instruyeron la investigación disciplinaria, por lo que Urrutia –quien actualmente obra como juez internacional de una misión de la OEA en Honduras- quedó sin la amonestación privada que se había sugerido a su respecto.
El pleno estableció que lo realizado por el magistrado "no fue una vulneración de la ley, sino más bien sólo una alteración de los procedimientos que los propios tribunales se han otorgado para la adecuada administración de justicia". Esto en relación a una audiencia que Urrutia se auto agendó para resolver si los presos podían votar tras una visita a cárcel que él mismo realizó.
El juez Urrutia fue quien instó a que personas que están privadas de libertad por una medida cautelar, pero que no han sido condenados y no han perdido su derecho a voto puedan hacerlo, preocupación que ha tomado ahora el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) y que incluso ha sido respaldado por la Corte Suprema que en fallos emitidos este año ha dicho que los reos pueden votar en las cárceles.
La decisión del pleno de la Corte santiaguina pese a sobreseer al magistrado le impone de igual forma un "llamado de atención" que quedará anotado en su hoja de vida una vez vuelva a ejercer labores en Chile. Por tal motivo su abogado Hernán Bosselin, de la Asociación Nacional de Magistrados, anunció que apelará a la Corte Suprema para que dicha anotación quede eliminada por no existir en el Código Orgánico de Tribunales.
El presidente de la ANM, Álvaro Flores, valoró la decisión del pleno de la Corte pues sostuvo: "siempre dijimos que era una situación absolutamente injusta en el marco de lo que parecía una persecución en contra del juez Urrutia y aún nos preocupa porque si bien se le ha sobreseído nuevamente la Corte incurre en algo jurídicamente improcedente que es aun estimando que no hay ilícito, que no hay infracción funcionaria, le hace una anotación en su hoja de vida lo cual es absolutamente incongruente y en ese aspecto el apoyo jurídico seguirá y por eso nuestro abogado apeló para que la Suprema termine con esta costumbre y esta arbitrariedad de decir no hay incumplimiento pero aplicar igual virtualmente una sanción".