La juez Stephanie Sautner revocó la libertad condicional de Lindsay Lohan, luego que ésta no asistiera a nueve sesiones de servicio a la comunidad, que debía cumplir como parte de su castigo por el robo de un collar.
La jueza también castigó a Lohan por no asistir a clases de rehabilitación, a lo que la abogada de la actriz respondió que su cliente no tiene los fondos necesarios para poder pagar los costos que esto significa.
Según medios como TMZ y CNN, Lohan es responsable de estas faltas, por lo que fue ingresada a custodia policial, siendo esposada en medio del juicio. La actriz deberá pagar US$100 mil para salir bajo fianza. De lograrlo, tendrá que cumplir el resto de sus horas de servicio comunitario, antes del 2 de noviembre.
La próxima audiencia, que decidirá el futuro de la actriz, quedó agendada para el próximo 2 de noviembre.
