"Nos tiemblan las piernas por su culpa". Así de grave es la situación que viven los jugadores del Steaua de Bucarest debido a las amenazas e insultos del Gigi Becali, dueño del club, según la denuncia anónima de un miembro del plantel.
La anterior declaración fue realizada anoche por uno de los jugadores del equipo rumano en el programa de televisión Fanatik Show, acusando a su polémico jefe que ya registra varios episodios de violencia que más se acercan a una película de gangster que a una directiva de fútbol.
En uno de los hechos más recordados, el magnate logró dar caza a uno de los ladrones que había sustraído un auto de lujo de su propiedad, y tras raptarlo y golpearlo reiteradamente, logró recuperar el vehículo para luego entregar al delincuente a las autoridades.
Protegido por el anonimato, el jugador del Steaua aseguró que el polémico propietario de la entidad ha convertido el ambiente en el equipo en un infierno, ofreciendo detalles sobre lo sucedido en el vestuario el pasado jueves durante el descanso del encuentro de Liga Europa entre Steaua y Sheriff Tiraspol, que acabó con el despido del entrenador Cristiano Bergodi.
Según el jugador, Becali entró furioso a los vestuarios tras la primera parte, en la que su equipo no logró abrir el marcador ante su modesto rival, y recriminó su actuación a varios futbolistas, que aguantaron la ira del magnate mirando al suelo en silencio.
En ese momento intervino el entrenador, que invitó de forma educada a Becali a salir y cerró la puerta, situación que no fue pasada por alto, ya que luego sería destituido de su cargo.
Cabe destacar que el propio Cristiano Bergodi ha confirmado la versión del jugador, asegurando que llevará a Becali ante la FIFA si no recibe todo el dinero que le pertenece por contrato.