Amargura y frustración era lo que sentían los jugadores de Universidad Católica. En el último minuto, Octavio Rivero anotó de penal el empate definitivo a favor de O'Higgins y le arruinó una victoria que ya estaban celebrando los hinchas en San Carlos de Apoquindo. Eso motivó a que los valores "cruzados" hicieran una dura autocrítica por su rendimiento en el Torneo de Apertura.
El capitán Cristián Alvarez señaló tras el pitazo final que "teníamos para haberlo liquidado. Hicimos el partido que teníamos que hacer. Aguantamos, porque estamos pasando por un momento malo. Jugamos de chico a grande en gran parte del partido, pero lamentablemente nos empatan al último".
"Está enrarecido el ambiente por los resultados. Uno entiende al hincha, hay que levantar cabeza y tirar para adelante", agregó.
El ex River Plate señaló que "todos somos responsables, este es un conjunto. Acá nadie se salva, estamos todos en lo mismo".
"En el equipo no hay problema y cada fin de semana tratamos de mejorar. Esperamos tener una racha ganadora. Después de la tormenta debe salir el sol", añadió.
Sobre si se despidieron definitivamente de la lucha por el título, Alvarez dijo que "está difícil, muy difícil".
En tanto, Darío Bottinelli también fue crítico por el mal momento de su club y comentó que "lastimosamente en la última jugada hubo un penal para O'Higgins. Fallamos en la definición. Creo que se hizo un buen partido. Perdimos por la definición, porque tuvimos varias ocasiones".
Por último, también asumió la culpa por el duro momento de la UC: "Todos somos responsables, más que nada los jugadores que salimos a la cancha. Tenemos que seguir trabajando".
