YPF SA, la empresa productora de petróleo crudo que el gobierno argentino expropió en 2012, y los agentes colocadores de una emisión, entre los que se contaba Goldman Sachs Group, lograron que se desestimara la demanda entablada por un inversionista en la que se acusaba a la compañía de realizar afirmaciones falsas antes de su oferta pública de marzo de 2011.
La petrolera, sus directores y los agentes colocadores fueron acusados en la demanda presentada en febrero pasado de no revelar en un registro de emisión que la compañía corría el riesgo de ser nacionalizada por el gobierno argentino. Morgan Stanley y Credit Suisse Group AG también fueron demandados como agentes colocadores junto con Goldman Sachs de Nueva York. Repsol SA, la empresa con sede central en Madrid a la cual se le expropió YPF, también estaba acusada.
La jueza de distrito de Estados Unidos Shira Scheindlin concedió la solicitud de los demandados de desestimar la demanda, declarando que los inversionistas no habían presentado pruebas suficientes de que había tergiversaciones materiales u omisiones. También dijo que los inversionistas no presentaron sus reclamos en forma oportuna y que muchas de las omisiones que alegaban "habían sido divulgadas o eran cuestiones de conocimiento público".
El gobierno de la presidente de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, expropió YPF, el mayor productor de crudo del país, de manos de Repsol en abril de 2012. Argentina posee las segundas mayores reservas de gas de esquisto y las cuartas de petróleo de esquisto, según los datos de la Administración de Información de Energía de Estados Unidos. El país ofrece incentivos fiscales y de exportación a las compañías energéticas que inviertan como mínimo US$1.000 millones en un período de cinco años.
Repsol está cerca de llegar este mes a un acuerdo con Argentina sobre los términos definitivos de un paquete de compensación por la expropiación de YPF, poniendo fin a un conflicto de dos años, dijeron dos personas con conocimiento del proceso. Los ejecutivos de Repsol trabajan en la redacción del documento en Buenos Aires con miembros del equipo de ministro de Economía de Argentina, Axel Kicillof, señalaron las personas, que pidieron no ser identificadas antes de la firma de un acuerdo vinculante.
Repsol e YPF fueron acusadas en una demanda presentada en el juzgado federal de Manhattan de realizar "anuncios públicos optimistas" mientras se enfrentaban a la creciente posibilidad de una toma de control por no "producir adecuadamente petróleo y gas en Argentina" y no reinvertir un "porcentaje importante" de las ganancias en la empresa, según la demanda.