La salida de fin de semana que obtuvieron los líderes de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), Héctor Llaitul y Ramón Llanquileo, reabrió el debate sobre la entrega de beneficios penitenciarios.
El viernes, los comuneros quedaron en libertad temporal, dado su "comportamiento sobresaliente", según la comisión técnica de Gendarmería. Sin embargo, en marzo de 2013, Llanquileo estuvo prófugo durante dos semanas, tras no regresar de una salida de fin de semana. El hecho generó una serie de críticas por parte del ex fiscal Andrés Cruz, quien investigó el ataque al persecutor Mario Elgueta en 2008, caso por el que ambos mapuches fueron condenados.
En ese sentido, el ministro de Justicia, José Antonio Gómez, comentó que "estamos revisando el sistema. En el caso de las rebajas de condena, de beneficios penitenciarios, todas aquellas que signifiquen aumentar la prontitud de la libertad tienen que cumplir requisitos especiales y eso estamos revisando en la reglamentación interna y las leyes pertinentes", dijo.
Además, expresó que las decisiones son tomadas por un organismo autónomo de Gendarmería, que está conformada por el alcaide del penal, abogados y sicólogos. "Esto tiene tal independencia que hoy tenemos violadores de derechos humanos condenados a cadena perpetua y que están con beneficios, por lo tanto, si fuera una decisión que parte de la autoridad, a lo mejor, sería diferente", comentó.
Justicia Vecinal
Ayer, el titular de la cartera anunció en Recoleta un protocolo de trabajo con la División de Organizaciones Sociales, que busca capacitar a dirigentes sociales en técnicas de manejo y resolución de conflictos, en el marco del programa de Justicia Vecinal". El alcalde, Daniel Jadue, indicó que la instancia es fundamental para acercar la justicia a los barrios: "Será un aporte fundamental de participación ciudadana".