Un tribunal holandés ordenó hoy a las autoridades tomar la tutela temporal de una niña de 13 años, demorando su plan de navegar sola alrededor del mundo hasta que los sicólogos evalúen su capacidad de embarcarse en ese riesgoso viaje.
Los jueces dijeron que Laura Dekker enfrentaría riesgos mentales y físicos si le permitieran llevar adelante el viaje de dos años en su embarcación de 8 metros llamada Guppy.
El tribunal dijo que podía seguir viviendo con su padre, pero que estaría bajo la responsabilidad de las autoridades del cuidado de menores durante dos meses mientras un sicólogo infantil evalúa su caso.
El caso en esta nación de tradición marítima atrajo la atención mundial y planteó un debate sobre la responsabilidad paternal cuando los niños desean lanzarse a aventuras peligrosas.
La muchacha estaba navegando hoy y no asistió a la audiencia. Su padre, Dick Dekker, estuvo en el tribunal donde escuchó la decisión de los tres jueces y no formuló declaraciones.
Richard Bakker, vocero del Consejo de la Protección de la Niñez, saludó el fallo. "Nos satisface esta decisión", dijo, y exhortó a padre "a cooperar con la investigación y garantizar la seguridad de Laura".
Como el tribunal no retiró a la niña de la casa paterna ni descartó la posibilidad de que haga el viaje, el abogado de la familia, Peter de Lange, consideró que fue un fallo aceptable.