El 9° Juzgado Civil de Santiago falló en contra de Enex, la filial de combustibles del grupo Luksic -que opera la marca Shell en Chile- tras una demanda interpuesta por la empresa Surenergy, ligada a dos ex ejecutivos de Shell: Christian Martin y Ricardo de Rodt.
La discrepancia surgió en 2011 y se relaciona con el acceso a la planta de carga y descarga Pureo, ubicada en Puerto Montt, y que pertenece a tres empresas: Copec, Enex y Petrobras. A juicio de los demandantes, se les ha imposibilitado acceder a plantas de carga, descarga y almacenamiento de combustible, tal como habían convenido en un contrato de suministro. Justamente, el tribunal consideró que la filial del grupo Luksic había incumplido el contratoy la obligó a pagar una multa de $ 2.500 millones más la devolución de una boleta de garantía. Tratándose de un fallo de primera instancia, Enex presentó un recurso de apelación ante la Corte de Apelaciones. Surenergy también apeló.
"Enex S.A. incumplió el contrato de suministro de combustibles acordado con las demandantes, ya que no otorgó las alternativas para la carga del combustibles en todos los puntos ofrecidos", señala la resolución de primera instancia.
El tribunal concluyó que Enex "no remedió satisfactoriamente cualquier inconveniente, y no suministró el combustible, amparándose en una deuda muy menor a la línea de crédito que acordó con las demandantes, sin tener en cuenta que ellas a pesar de todas las dificultades, siguieron comprando el producto e incluso accedieron a firmar un acuerdo de pago".
La sentencia ordenó a la filial de Quiñenco (Enex) al pago a título de indemnización de $ 2.500 millones, más intereses y reajustes a la fecha de la transacción en efectivo. A esto se agrega la restitución de seis boletas de garantía que suman en total $ 580 millones. Añade que mientras Enex no dé cumplimiento al fallo, la firma tendrá que pagar cinco millones por cada mes que pase.
"La cifra total alcanza $ 3.200 millones, pero podría llegar a $ 4.500 millones si se considera que buscamos que se condene por daño moral a Enex", aseguró la abogada de Surenergy, Jacqueline Quezada.
"Errores evidentes"
Para el gerente de Asuntos Corporativos de Enex, Juan Eduardo López, "la sentencia contiene errores evidentes, tanto numéricos como conceptuales". A su juicio, esta "se basa únicamente en las declaraciones de dos testigos, sin incluir otro tipo de pruebas (peritajes). Plantea supuestos perjuicios económicos para Surenergy, que no son tales. Contiene imprecisiones numéricas respecto de las indemnizaciones demandadas", dijo.
Y complementó: "Enex brindó alternativas de suministro de combustible a Surenergy en el momento en que esto ocurrió, las que no fueron aceptadas por dicha empresa. Se ofrecieron facilidades para el abastecimiento en otras plantas y terminales, pese a los problemas logísticos que ello implicaba para Enex".