La Juventus de Arturo Vidal recibe al Mónaco en la ida de los cuartos de la Champions League, en una eliminatoria en la que los italianos son el teórico favorito, aunque la sorpresa que ha causado el cuadro del principado francés en el torneo llama a mirar con desconfianza.

En Francia, el Mónaco se ha convertido en una paradoja indescifrable: Consigue más puntos cuando juega fuera de su estadio (32 en 16 partidos) que en casa (26). A nivel europeo,también se mueve en esta dinámica. Excepto una derrota en Lisboa ante el Benfica (1-0) en la fase de grupos, el equipo  dirigido por el portugués Leonardo Jardim ha conseguido importantes resultados fuera de casa.

De hecho, su gran golpe lo dieron en Londres. Con un equipo plagado de bajas, encauzó la clasificación a cuartos al ganar 3-1 al Arsenal de Alexis Sánchez, en gran forma en la Premier League. Luego perdió 2-0 en el estadio Louis II, pero el trabajo había quedado hecho en la ida.

Las fortalezas y debilidades del Mónaco son ya conocidas: gran rigor defensivo y calidad a la hora de salir en contraataque, pero los problemas llegan cuando le toca construir el juego. "Había equipos muy difíciles y equipos muy muy difíciles. La Juve será  muy difícil", señaló en la previa el técnico de los galos.

Juventus recupera potencia

El dominador del fútbol italiano, en tanto, cuenta su propia historia. Tiene la duda de Andrea Pirlo, que se recupera de sus problemas físicos, pero contará con varios nombres que se ausentaron del último duelo en Serie A ante el colista Parma (1-0), un equipo que está al borde de la desaparición tras ser declarado en quiebra.

Para el partido, el técnico Massimiliano Allegri reservó a Giorgio Chiellini, Stephane Lichtsteiner, Claudio Marchisio, Arturo Vidal y Carlos Tévez. Todos estarán a disposición para el choque clave de hoy.

"No ganamos un solo duelo, esto lo dice todo. No hicimos un buen partido,  estuvimos lentos, concedimos muchas contras por los errores. Mónaco será otro  partido", avisó Allegri.