El brasileño Kaká piensa en un futuro en el fútbol de Estados Unidos cuando termine su actual etapa en el Milan italiano. "Un día me gustaría jugar en Estados Unidos", dijo el centrocampista al diario "Il Corriere della Sera".
Kaká aseguró que se sentará al final de temporada con el Milan para hablar de su continuidad. "Si tuviera que cambiar, sería a Estados Unidos", dijo el jugador de 31 años, que ante el Chievo Verona disputó su partido número 300 con el Milan.
Después de cuatro decepcionantes años en el Real Madrid, Kaká regresó esta temporada al Milan, con quien en 2007 había ganado la Liga de Campeones y el título de mejor jugador del mundo.
"No me he arrepentido en ningún momento de haber vuelto", aseguró. "El recibimiento fue aún más cariñoso de lo que me había esperado, pero la temporada no fue tan bien como se esperaba. Pero yo veo la crisis como una oportunidad de crecimiento".
El Milan está eliminado de todas las competiciones y en la Liga italiana ocupa puestos de mitad de tabla.
