No sólo suma preseas para Chile cada vez que entra al foso olímpico para hacer volar el disco, pues la recordwoman y mejor lanzadora de disco nacional, Karen Gallardo, hoy también es protagonista de la historia del atletismo chileno.
Luego de que la copiapina clasificara al Mundial adulto de Moscú con un lanzamiento de 59 metros y 57 centímetros en el torneo Vila Nova de Cerveira en Portugal, superando en siete centímetros la marca mínima requerida por la IAAF (Asociación Internacional de Federaciones Atléticas), se convirtío en la séptima atleta nacional en asegurar su cupo a la cita planetaria.
De esta forma, la reciente medallista de bronce sudamericana pasó a integrar la máxima delegación chilena que se ha presentado en un mundial de atletismo, sobrepasando a los cuatro representantes que llegaron al Mundial de Berlín en 2009, a los dos que estuvieron en Canadá 2001 y París 2003, y al único chileno que participó en Japón 2007, episodio que se repitió en Finlandia 2005.
Curiosamente, esta vez el equipo de atletas que representará a Chile en Rusia, entre el 10 y el 18 de agosto próximo, está compuesto por mayoría femenina: cuatro mujeres y dos hombres. Entre ellos destacan, además de Gallardo, la maratonista Érika Olivera, los marchistas Yerko y Edward Araya, la velocista Isidora Jiménez, la balista Natalia Duco y la especialista en salto largo, Macarena Reyes.
"El tema de que seamos más mujeres que quede claro que no es porque sea más fácil, las marcas son duras para todos y hay que tener en cuenta que competiremos con la elite del atletismo mundial. Me parece que somos un grupo de mujeres aguerridas y dispuestas a dejar mucho por seguir nuestros sueños", asegura Karen Gallardo respecto de un hecho que considera casualidad.
En cuanto al número de atletas que se presentará en Moscú y que, incluso podría aumentar en los días previos al evento, la discóbola declara que "el progreso es natural, somos un grupo de atletas y entrenadores que hacemos nuestro trabajo seriamente y va de la mano con el apoyo económico que estos años ha ido incrementándose y nos ha permitido tener más roce internacional. Yo creo que vamos por buen camino".
Antes de sellar su clasificación mundialista, la mejor especialista nacional del disco se vio complicada por no poder conseguir la marca que necesitaba (59 metros y 50 centímetros). De hecho, en su actuación previa a Portugal, en el Meeting de Madrid, resgistró 56 metros y 52 centímetros, algo muy bajo para sus expectativas.
"Este año ha ido cuesta arriba, pero me costó mucho lograr la clasificación, recién hoy logré hacerlo y fue muy justo para mi gusto. Ahora viene una etapa delicada, tengo poco tiempo para ajustar los últimos detalles de la preparación (Mundial de Moscú) y la idea es mejorar. Quiero cambiar un poco los números", expresó.
El impulso que le dio la marca clasificatoria no la desenfoca de sus objetivos, por eso prefiere ser cautelosa cuando se proyecta para la copa del mundo rusa. "No me gusta hablar de marcas ni de lugares porque lo que busco es superarme, siempre voy y doy el todo por el todo", dice.
Por estos días, Karen Gallardo se concentra en León, España, a modo de preparación para el Mundial de Moscú. La atleta chilena trabaja para superar la marca de 60 metros y 48 centímetros que dejó en 2011, la misma que la posiciona hoy como la mejor lanzadora de disco del país.