El actor estadounidense Keanu Reeves no echa de menos a "Neo", su popular personaje en la saga de películas de "Matrix", a quien considera un tipo que sólo quería disfrutar de una vida normal.

"No echo de menos a Neo. Tuvo una buena vida. En realidad me da pena el tipo: lo único que quería era salir con Trinity, tener niños e ir a trabajar", bromeó, sin embargo, sostuvo que la película fue para él una "gran experiencia vital".

Reeves afirmó además que le gustaría volver a trabajar con los hermanos Wachowski (los directores de esa cinta) y que de hecho en alguna ocasión han contemplado esa posibilidad, aunque los proyectos finalmente no salieron adelante.

El actor se encuentra estos días en el festival internacional de cine de Marraquech, en cuya inauguración se proyectó el pasado viernes "Henry's crime", su último largometraje, en el que dice haberse sentido "muy involucrado" y que considera un "buen giro" en su carrera.

"Ser parte de la creación de algo que otros artistas van a desarrollar fue algo nuevo y un placer para mí. Trabajar durante cuatro años en un guión que luego James Caan o Vera Farmiga leyeron y les gustó hasta el punto de querer actuar en él es un placer", explicó Reeves, que también ha sido productor de algunas cintas.

Reeves dejará hoy Marraquech para viajar a China, donde está previsto que empiece próximamente el rodaje de su próxima película, "47 Ronin", basada en la historia real de 47 samurais japoneses que en el siglo XVIII se vieron obligados a suicidarse por el rito tradicional del "seppuku" por lealtad a su señor feudal.