Hungría vuelve a participar en una Eurocopa después de 44 años. En 1972 luchó por el tercer puesto ante Bélgica, anfitriones del torneo. En Francia, los magiares están cerca de alcanzar los octavos de final de la mano de una particular figura: Gabor Kiraly.

El portero es el jugador más veterano en la historia de la Eurocopa. Ante Austria consiguió el récord con 40 años, 2 meses y 15 días. Pero no sólo su edad llama la atención. Con un evidente sobrepeso y el uso de pantalón en la cancha, Kiraly se presenta como el personaje de la tradicional copa europea.

En el partido contra Islandia, el portero tuvo una grosera intervención que terminó con el gol de Gylfi Sigurdsson de penal. Minutos antes, Kiraly amagó para lanzar con las manos hacia un lado, pero decidió pasar el balón entre sus piernas, sin mirar.

Quizás no tiene la fisionomía de metas como Neuer, Buffon o De Gea. Pero el meta lidera con su experiencia a una selección que está muy cerca de avanzar a segunda fase por primera vez, después de cuatro décadas.