Considerada como una de las figuras fuertes del gobierno de Nicolas Sarkozy, esta abogada de 55 años se convirtió en la primera mujer en ocupar el cargo de Ministra de Finanzas de Francia y ha estado a cargo de la política económica de ese país en el difícil contexto de una de las crisis más severas desde la Segunda Guerra Mundial.

Christine Lagarde nació en París en 1956 y tras graduarse en derecho, hizo gran parte de su carrera profesional en Estados Unidos, donde encabezó el bufete de abogados Baker & McKenzie en Chicago. Bajo su liderazgo, dicha firma aumento sus ingresos brutos en un 50%.

En el ámbito político, partió en 2005 cuando se desempeñó como ministra de Comercio Exterior y posteriormente fue nombrada titular de la cartera de Agricultura y Pesca.

Lagarde ha participado regularmente en los encuentros del G-20 y ha contribuido a fomentar las políticas internacionales en materia de supervisión y regulación en el sector financiero.

En el año 2009, obtuvo el puesto número 17 como la mujer más influyente del mundo según la revista Forbes. También fue catalogada como la quinta mejor mujer Ejecutiva, por el Wall Street Journal Europe y se convirtió en uno de los 100 líderes mundiales en la revista Time.

ABUSO DE AUTORIDAD
El pasado 10 de mayo, la Fiscalía General francesa ordenó a la Corte de Justicia la apertura de un procedimiento, al considerar que Lagarde pudo cometer abuso de autoridad en la fijación de la indemnización al empresario francés Bernard Tapie en 240 millones de euros por la venta de Adidas en 1993.

No obstante, la ministra hizo hincapié en que aunque la investigación vaya más lejos, mantendrá su candidatura a la dirección de la FMI porque tiene la conciencia tranquila y a su juicio siempre ha actuado "de cara al interés del Estado y de la ley".

En el mes de abril, parlamentarios de la oposición ya habían presentado una demanda en su contra, luego de que en el año 2008 un tribunal arbitral decidiera otorgar a Tapie dicha indemnización que causó una gran controversia política.

CANDIDATA AL FMI
Ahora, Lagarde, es considerada como una de las favorita entre los europeos para dirigir el FMI, en parte por su reputación por su habilidad en las negociaciones internacionales para estabilizar la economí­a mundial durante la crisis financiera global.

La canciller alemana, Angela Merkel, la calificó hace poco como una "personalidad brillante y experimentada", por lo que su apoyo se da por seguro, al igual que el del secretario del Tesoro británico, George Osborne.

Según la propia Christine Lagarde, "el desafío que más presiona al Fondo no es sólo jugar plenamente su papel en Europa, sino también responder a la petición de ayuda de ciertos países de África del Norte y Oriente Medio".

Y por lo mismo, ha expresado que la FMI "necesita continuar su evolución hacia una mayor reactividad, equidad y equilibrio en su acción de cara a una estabilidad económica y financiera mundial", para servir mejor a los países que lo integran.