Los padres de las más de 200 estudiantes secundarias secuestradas en Nigeria por el grupo islamista Boko Haram han criticado la gestión del ejército, y creen que al principio éste no actuó con la urgencia que requería la situación.
Los militares se defienden haciendo valer que han lanzado un amplia operación de búsqueda, incluyendo la selva de Sambisa, en el estado de Borno, donde Boko Haram tiene campamentos fortificados.
El Departamento de Estado norteamericano dijo el lunes que había indicios de que las niñas podrían haber sido llevadas a países vecinos.
Gente de la zona dijo, sin que pudiera confirmarse, que algunas de las chicas habían sido vendidas a combatientes islamistas como futuras esposas en Camerún y Chad.
Enoch Mark, muy crítico con el gobierno desde que su hija fue secuestrada, dijo que el ejército sigue sin hacer lo suficiente.
"Los miembros de Boko Haram no son espíritus ni criaturas extraterrestres a las que no se pueda seguir y domeñar", dijo con sarcasmo a la AFP.
"El gobierno debería encontrar a nuestras hijas o, si no es capaz, pedir ayuda internacional", añadió. "La angustia y el trauma que esto nos supone a los padres se están volviendo insoportables".
Mark advirtió al gobierno que si no logra rescatar a las niñas, los islamistas podrían envalentonarse y secuestrar a más gente.
"Si no rescata a las niñas, esto puede ser el comienzo de más secuestros y de la anarquía", dijo.
"Ahora ha sido en Chibok pero, ¿quién sabe dónde será mañana?", se pregunta.
"Hemos estado todo este tiempo imaginando lo que podría ocurrir a nuestras hijas estando en manos de esa gentuza", dijo a la AFP desde Chibok Lawal Zanna, cuya hija está entre las 223 secuestradas.
"Ahora, Shekau ha confirmado nuestros temores", afirma.
INDIGNACIÓN INTERNACIONAL
La comunidad internacional alzó el tono este martes contra el grupo islamista nigeriano Boko Haram.
El secuestro de más de 200 estudiantes, de entre 15 y 18 años, ha llamado la atención de la ONU y de Estados Unidos, donde algunos senadores pidieron incluso una intervención.
"No podemos cerrar los ojos ante la evidencia de la barbaridad que se está produciendo ante nosotros en Nigeria", dijo la senadora demócrata Amy Klobuchar el lunes ante el pleno de la cámara.
El ministro británico de Relaciones Exteriores, William Hague, dijo este martes que Londres le está ofreciendo a Nigeria "ayuda práctica" para la liberación de las niñas.
Con un tono más afilado, la ONU avisó al grupo islamista de que el masivo plagio podría ser un crimen contra la humanidad.
"La legislación internacional prohíbe absolutamente la esclavitud, sea sexual o no. Estos actos pueden constituir, bajo ciertas circunstancias, un crimen contra la humanidad", dijo Rupert Colville, portavoz de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay.
El grupo islamista secuestró a 276 adolescentes estudiantes en Chibok, a las que sacó de sus dormitorios. De ellas, 223 continúan en cautiverio, mientras que otras 53 pudieron escapar, según la policía.