Christian Garin se encuentra en plena pretemporada con Rafael Nadal. El equipo compuesto por Toni Nadal y Tomeu Salva se ha encargado de que el chileno cumpla un riguroso plan de trabajo, que se extiende por nueve horas diarias de físico y tenis de lunes a sábado, mientras que el domingo está destinado al descanso, pero con tareas.

También ha habido tiempo para excursiones en bicicleta y partidos de fútbol, para oxigenar la mente.

Pero también estos días han sido tiempo de decisiones. El cuerpo técnico determinó que el número uno nacional no dispute las clasificaciones del Abierto de Australia, pues pese a que tiene ranking para ingresar, la prioridad es sumar puntos cuanto antes.

Es por esta razón que además se determinó que Garin comience su temporada en la lejana Bangkok, la capital de Tailandia. Ahí disputará dos challengers, en las dos primeras semanas de enero, aprovechando que los cuadros principales son mucho más abordables.

La superficie también es determinante, pues por primera vez en su carrera conmenzará el año jugando en cancha de cemento, la misma superficie en la que se disputará la serie de Copa Davis entre Chile y República Dominicana.

"La idea es jugar el máximo número de partidos posible a principios de año", comenta Joan Suasi, agente del chileno (211º). "Hay que sumar puntos en challengers", apunta.

La aspiración es que pueda ingresar al grupo de los 150 mejores a la brevedad.

Después de la participación de Garin en la serie ante los caribeños, se analizará el calendario. Eso sí, una de las opciones que cobra más fuerza es que dispute las clasificaciones de los torneos ATP en arcilla, en febrero, algo que, de acuerdo con la ubicación que tenga en ese entonces, le permitirá apostar a mayor cantidad de torneos importantes.