La arremetida de internet como plataforma para el cine

Con un elenco liderado por Forest Whitaker y Oprah Winfrey, El mayordomo es una de las fuertes candidatas en la carrera por el premio Oscar. Su estreno en salas está programado para el 23 de enero, pero quienes tienen acceso a las plataformas de streaming en internet Netflix y iTunes ya pueden ver la película en computadores o tabletas, ya que el filme está disponible en estos servicios desde el 27 de diciembre.

Para el gerente general de Cine Hoyts, Francisco Schlotterbeck, el estreno de El mayordomo a través de internet antes que en el cine se debió a una "descoordinación de la distribuidora, la cual no actuó con resguardo con la ventana de su película". También agrega que "se trata de algo súper puntual, aislado, porque la distribuidora no sabía que estaba en Netflix. Pero en la medida en que vuelva a ocurrir, vamos a evaluar cómo procedemos".

Pero aunque se trate de un caso más o menos particular, lo cierto es que el estreno de El mayordomo en streaming antes que en salas resulta un ejemplo de la arremetida de internet como plataforma para el cine, ganando terreno incluso frente a otras pantallas, como el cable y la venta de DVD.

Las fechas y momentos de estreno de las cintas en cada pantalla están regulados estrictamente, ya que influye en el negocio de distintas industrias. Así, el calendario de estrenos en salas de películas más pequeñas como El mayordomo se maneja con tres meses de antelación; por eso, por ejemplo, Cine Hoyts mantiene agendada la película para el 23 de enero. "Si después se corre o no se estrena, depende de ellos", comenta Schlotterbeck. Diamond Films, la empresa que distribuye El mayordomo en Chile, declinó hablar del tema.

La llegada de internet con fuerza a la pelea ha contribuido a remecer el panorama, pero todavía se mantienen los órdenes tradicionales. La gerenta comercial de BF Distribution, Rosario Gallino, comenta que los estudios que venden los derechos a las distribuidoras locales dejan claro en el contrato el término de una "ventana" (momento en que cada pantalla tiene la exclusividad de exhibición) e, incluso, suelen recordar cuándo un límite de distribución se avecina. En ese mismo sentido, Fabiola Manso, gerenta de marketing de Sony Pictures, explica: "Los estudios saben las fechas de todos los estrenos de todos los países".

Por su parte, en Fox Warner comentan que su estrategia para evitar que una situación así ocurra es estrenar sus películas lo más cerca posible en las distintas partes del mundo.

LA INDUSTRIA

El orden de estreno tradicional hasta ahora funciona así: las 40 películas más grandes del año, como Iron Man 3 o El hobbit, se estrenan en forma simultánea, o una semana más tarde que en Estados Unidos, y las medianas tienen un promedio de tres semanas, como Escándalo americano (American hustle). Pero las pequeñas deben esperar al menos cuatro meses, lo que precisamente genera un espacio para encontrar nuevas formas de distribución. Esto, porque los filmes también poseen diferentes derechos según las distintas etapas de exhibición, que se negocian de manera separada.

La ventana primordial sigue siendo cine, seguido por VOD (Video on demand), donde se paga para ver cada película y tiene categorías de "por transacción" y "por suscripción"; pasando luego a cable premium, al básico y, finalmente, a la TV abierta.

Entre las dos primeras existe una ventana promedio de 90 días, que puede variar según el perfil de cada filme, especialmente en el caso de las superproducciones. Pero la llegada de las plataformas online ha modificado el negocio. "La ventaja de las plataformas online es que nosotros trabajamos directamente con los estudios dueños de la película en Estados Unidos. Ya no pasa por un tercero", explica Alejandro Lois, gerente general de Bazuca, empresa que antes alquilaba físicamente películas y series, y que ahora funciona sólo como plataforma digital.

Además, el plazo de 90 días entre estreno en salas y la segunda plataforma ya no aplica a todas las películas, pues ya se han generado estrategias distintas, llegando incluso a estrenarse en paralelo. Fue el caso de Aftershock, de Nicolás López, que debutó en las salas de Estados Unidos y en iTunes el 10 de mayo de 2013. "La salida en cine (con 100 copias en funciones de medianoche) fue más bien una campaña para estrenar la película online", explica López, quien considera que el panorama cinematográfico se está modificando: "Claramente está cambiando la forma en que vemos y dónde vemos cine. Y hay películas, como los géneros de terror y comedia, que se prestan para estrenarse en multiplataformas". Varias películas independientes, como Margin call y All the good things, con Ryan Gosling, ya optaron por esa misma modalidad en sus debuts estadounidenses.

"Depende de la estrategia que tengas: con una gran película nunca estrenarías primero en Netflix, porque va a hacer una buena taquilla y no tendría la misma vida útil. Pero después vas a salir a exhibirla así", añade Alexandra Galvis, directora de Market Chile, sello de distribución local e internacional de cine chileno. De esta manera, se entiende que filmes de perfil más independiente opten por las plataformas online una vez pasados los cuatro meses de desfase entre el estreno en Estados Unidos y la fecha en que suelen exhibirse en nuestro país, sin pasar por las salas de cine. De hecho, en el catálogo de iTunes ya están anunciados los estrenos de exitosos filmes indie como Compañeros de copas (17 de enero), con Olivia Wilde; Encontrando tu voz (23), de Lake Bell, y How I live now (28), con Saoirse Ronan. Filmes de esas características tuvieron una distribución limitada en ese país y también se estrenaron por esta plataforma.

NUEVO ESCENARIO

Y hay más. Tanto Netflix como iTunes también ofrecen Desde muy, muy atrás (The way, way back, anunciada por Diamond Films originalmente el 26 de diciembre) y Ladrones de la fama, la última película de Sofía Coppola, que no ha llegado a las salas, pese a haber estado en el calendario de la distribuidora para el 3 de octubre del año pasado. Y el fenómeno también ha tenido ejemplos con películas de perfil más taquillero, como La caída de la Casa Blanca, disponible en Netflix a sólo un mes de su debut en salas locales. Como explica Carolina González, de CDI Films, el de transmisión online se trata de un tipo de derecho muy nuevo, por lo tanto, no siempre se ofrece al momento de vender las películas, lo que permite a otros sitios hacer el negocio en paralelo.

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"Para nosotros, poder llegar a ser una plataforma de primera ventana, para que nuestros suscriptores puedan disfrutar de los estrenos más actuales, es una prioridad. También hay numerosos contenidos que se lanzan en exclusiva para otras regiones, antes de lo que se estrenan en Estados Unidos y viceversa", explica Kari Pérez, gerente senior de comunicación corporativa de Netflix.

De esta forma, además de convertirse en la primera instancia de estreno, las plataformas online están compitiendo de igual a igual con los sistemas de VOD de los operadores de cable. En ese sentido, la principal ventaja de Netflix es que funciona como sistema de suscripción donde se paga mensualmente por el servicio un precio fijo, que incluye la biblioteca de películas más estrenos, y no por cada filme, como ocurre con iTunes -plataforma en que se pagan US$ 19,99 por la compra de una película y US$ 4,99 por arrendarla-, Bazuca o los sistemas de pago de películas de los operadores de cable.

"Más que Netflix, me parece que iTunes y los servicios de pago por cada película se van a quedar con los estrenos, porque podrán pagar precios más altos a los estudios para tenerlos", vaticina Eduardo Arriagada, académico de la Universidad Católica y experto en nuevos medios.

El aumento del poderío de internet como plataforma se ve reflejado en los nuevos negocios que ha hecho Netflix. Así, firmó en junio pasado un acuerdo con el estudio de animación de DreamWorks. Además, a fines de 2015 será la primera ventana de exhibición tanto de la biblioteca de filmes de los estudios Disney como de sus estrenos en cine. El último acuerdo fue con The Weinstein Company, que aplica para las películas que debuten en el cine a partir de 2016. En las negociaciones no sólo dejó atrás a las compañías de cable premium de ese país, sino también se transformó en la primera ventana de TV paga.