El Celta de Eduardo Berizzo se erigía como una de las revelaciones de la liga española, más aún cuando derrotaron 1-0 al Barcelona, en el Camp Nou, el pasado 1 de noviembre. No obstante, tras ese gran triunfo, el conjunto gallego se durmió, iniciando una racha de malos resultados que inquieta: suman cinco partidos sin ganar, entre La Liga y la Copa del Rey, con cuatro derrotas consecutivas. Más aún, en esos cinco encuentros, han convertido sólo un gol.

Todo comenzó el 8 de noviembre, empatando de local 0-0 con Granada. Luego de la fecha FIFA, que en Europa se aprovechó para las Eliminatorias de la Euro 2016, cayó 0-1 con Rayo Vallecano, el 23 de noviembre. El 29 del mismo mes, pierden por la cuenta mínima con Eibar, en casa. El martes 2 de diciembre, por la Copa, es superado 2-1 por Las Palmas, y hace una semana se inclinó ante el poderío del Real Madrid. Fue 0-3.

En la previa al duelo de hoy (18.00 horas de Chile) ante Málaga, el ex DT de O'Higgins admitió su preocupación: "Las derrotas obligan a reflexionar. Las cosas que antes nos salían bien ya no nos están saliendo y necesitamos recuperar esta contundencia que teníamos en ataque y que se nos extravió".

Dentro del diagnóstico del "Toto", para mejorar el funcionamiento del equipo, el técnico reconoce que les falta profundidad. "El equipo sostiene el funcionamiento y la elaboración, adueñarse de los partidos a través de presionar y de jugar, pero hemos perdido esa profundidad que nos daba puntos. Y esto es lo que hay que revisar", declaró.

Los chilenos Fabián Orellana y Pablo Hernández están en la convocatoria.